MEMORIA HISTÓRICA

Argentina juzga a los médicos que robaron niños durante la última dictadura

Los organismos de derechos humanos aún buscan a unos 400 hijos de desaparecidos

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Por primera vez en Argentina personal médico será juzgado a partir de este miércoles por su presunta responsabilidad en la apropiación de niños en centros de detención clandestinos durante la última dictadura militar (1976-1983).

Los imputados que se sentarán en el banquillo del Tribunal Oral Federal número 6 de Buenos Aires son los médicos Norberto Bianco Raúl Martín y la obstetra Luisa Arroche, a los que se relaciona con el centro de detención clandestino Campo de Mayo, en la periferia bonaerense.

Están acusados del robo de los hijos de Marta Álvarez, Susana Stritzler, Mónica Masri, Valeria Beláustegui Herrera, María Eva Duarte, Myriam Ovando, Silvia Quintela Dallasta, Norma Tato y Liliana Isabel Acuña.

La causa se desprende de la investigación por el Plan Sistemático de Apropiación de Menores, por la que ya fueron condenados el exdictador Reynaldo Bignone y el excomandante Santiago Riveros, que serán juzgados nuevamente por ser los jefes militares de la zona.

Según ha señalado la Asociación Abuelas de Plaza de Mayo en un comunicado, Bianco estuvo prófugo más de diez años en Paraguay, hasta que fue extraditado. En un principio, el expediente contra médicos de Campo de Mayo contaba con más acusados, pero Julio Caserotto, a cargo del servicio de obstetricia, falleció, mientras que Jorge Habib Haddad y Ramón Capecce fueron declarados "incapaces de defenderse".

De los tres acusados que llegarán este miércoles al banquillo, Martín está señalado por la querella como el "retransmisor" de la información sobre las mujeres secuestradas por el terrorismo de Estado en el hospital de Campo de Mayo.

Bianco fue jefe del Servicio de Traumatología de la institución y es señalado como "personaje clave" en el robo de niños, en tanto que Arroche está acusada de haber firmado el certificado de nacimiento falso de uno de los bebés apropiados, Francisco Madariaga Quintela.

Como él, otros cinco niños de las nueve apropiaciones que se investigan ya recuperaron su identidad por el trabajo de Abuelas de Plaza de Mayo. "Para Abuelas es un juicio importante ya que en el banquillo de los acusados estarán no sólo dos altos jefes militares, sino además tres profesionales que pusieron sus conocimientos y sus matrículas al servicio de crímenes gravísimos", manifestó la asociación humanitaria en el comunicado previo al juicio.

Los organismos de derechos humanos aún buscan a unos 400 hijos de desaparecidos, robados durante la última dictadura argentina.