Amnistía ve indicios de "crimenes de guerra" en los bombardeos rusos sobre Siria

La organización denuncia que los ataques han causado la muerte a cientos de civiles

Un hombre camina entre edificios dañados por los bombardeos rusos en la ciudad siria de Idleb.

Un hombre camina entre edificios dañados por los bombardeos rusos en la ciudad siria de Idleb.

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Amnistía Internacional denunció este martes que los ataques aéreos rusos en Siria han matado a cientos de civiles y destruido zonas residenciales de ese país, con una manera de proceder que evidencia violaciones de la legislación internacional

En un informe, "Civilian objects were not damaged: Russia's statements on its attacks in Syria unmasked", AI pone de manifiesto el "alto precio" que los civiles sirios han pagado por aparentes ataques de Rusia en ese país.

El documento divulgado por la organización se centra en seis ataques concretos perpetrados en las ciudades sirias de Homs, Idleb y Alepo entre septiembre y noviembre, que mataron al menos a 200 civiles y alrededor de una docena de combatientes.

MUERTES ENCUBIERTAS

El informe incluye pruebas que sugieren que las autoridades rusas podrían haber mentido para encubrir los daños civiles causados por un ataque aéreo contra una mezquita y un hospital.

Muestra también evidencias que ponen de manifiesto el uso, por parte de Rusia, de bombas de racimo, internacionalmente prohibidas en áreas residenciales pobladas.

"Algunos bombardeos aéreos rusos parecen haber atacado directamente a civiles u objetos civiles, atacando áreas residenciales sin objetivos militares evidentes e incluso instalaciones médicas, lo que ha resultado en muertes y lesiones a civiles", dijo Philip Luther, director del programa de AI para Oriente Medio y África del Norte.

DESMENTIDO RUSO

En opinión de Luther, estos ataques podrían constituir crímenes de guerra" por lo que es "crucial que las presuntas violaciones sean investigadas de manera independiente e imparcial".

Por su parte, las autoridades rusas han alegado que sus fuerzas armadas están atacando solamente objetivos "terroristas" y han negado haber matado a civiles.

Para elaborar su informe, Amnistía ha entrevistado a testigos y supervivientes de los presuntos ataques rusos y ha examinado evidencias en vídeos e imágenes, que muestran los resultados de esas agresiones.

MISILES CONTRA UN MERCADO

La organización también señala que no hubo objetivos militares en las inmediaciones de las áreas atacadas en Siria, lo que sugiere, según Amnistía, que los ataques podrían haber violado la legislación internacional y constituir, en algunos casos, crímenes de guerra.

En uno de las maniobras más sangrientas documentadas por AI se habla de tres misiles lanzados contra un concurrido mercado en el centro de Idleb, que se saldó con la muerte de 49 civiles.

"Rusia debe terminar con los ataques indiscriminados y otros ataques ilegales. Deben parar todo uso de bombas de racimo y dejar de tirar bombas sin dirección en áreas civiles", apuntó Luther.