América Latina respira tranquila tras llegarle el tsunami muy debilitado

Unas 650.000 personas fueron evacuadas de sus casas antes de que el tsunami se acercara a las costas chilenas. Los peores pronósticos no se han cumplido y el país ha respirado.

El agua apenas ha entrado a las calles de la localidad de Dichato, curiosamente el epicentro del terremoto de 8,8 grados del 27 de febrero del 2010. No se han producido daños ni víctimas.

El estado de alerta se ha levantado ya en todo el territorio chileno. Antes, el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, pidió a la población que no regresara por el momento a sus hogares. “Mientras no digamos lo contrario, la gente debe mantenerse en las zonas de protección".

Calma en Perú, Ecuador y Colombia

El tsunami derivado del seísmo en Japón llegó a Perú en la noche del viernes con olas que fluctuaron entre 1,45 metros y 15 centímetros. "Este primer oleaje llegó sin mayores contratiempos y sin ningún incidente que lamentar", dijo Defensa Civil.

El Instituto Oceanográfico de la Armada de Ecuador (Inocar) ha descartado finalmente riesgos en las costas de ese país. "Se está volviendo a las condiciones oceanográficas normales", ha explicado Jorge Cárdenas, director del organismo. “Felizmente, lo predicho no ha llegado a cumplirse en la magnitud que se esperaba y favorablemente tenemos una calma en los puertos ecuatorianos”, ha agregado.

Por último, el Gobierno colombiano ha levantado la alerta que había decretado en 16 poblaciones de la costa Pacífica. Lo mismo ha sucedido en los países centroamericanos.