Ban Ki-Moon denuncia el "repugnante, salvaje y deliberado" bombardeo al convoy

El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, denunció este martes el "repugnante, salvaje y aparentemente deliberado" ataque de este lunes contra un convoy humanitario en Siria y exigió rendición de cuentas para este y otros crímenes.

"Los trabajadores humanitarios que entregaban ayuda eran héroes. Aquellos que les bombardearon son cobardes", dijo Ban en su discurso de apertura de la Asamblea General de Naciones Unidas. "Justo cuando pensamos que no se puede ir a peor, el listón de la inmoralidad se hunde aún más", añadió.

El diplomático recordó que la ONU se ha visto obligada a suspender sus acciones humanitarias como resultado del ataque de ayer, que golpeó a un convoy humanitario de Naciones Unidas y la Media Luna Roja Siria (SARC) en la región de Alepo, en el norte del país. En el suceso murieron unos 20 civiles y al menos un empleado de la Media Luna Roja, según confirmó hoy el Movimiento Internacional de la Cruz Roja.

Las Naciones Unidas han anunciado este martes que suspenden todos los convoyes de ayuda humanitaria a Siria después del bombareo. Según ha anunciado el portavoz de la ayuda humanitaria de la ONU Jens Laerke, "como inmediata medida de seguridad, los otros movimientos de convoyes en Siria han sido suspendidos mientras evaluamos la situación de seguridad". 

Por su parte, Igor Konashenkov, portavoz del ministerio ruso de Defensa, ha asegurado este martes que ni los aviones rusos ni los del régimen sirio son responsables del ataque al convoy. "La información sobre el emplazamiento del convoy indica que solo estaba al alcance de los militantes [rebeldes] que controlan esas áreas, ha afirmado a la televisión Rossiya 24.

Por su parte, un portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, ha anunciado que las autoridades rusas van a investigar el ataque al convoy, que fue llevado a cabo o bien por la aviación rusa o por la del régimen sirio. "Nuestros militares investigan en este momento esas informaciones", ha señalado. 

El alto el fuego en Siria se saltó en mil pedazos el lunes tras el ataque aéreo de este lunes a un convoy humanitario en la provincia de Alepo que ha matado a doce personas. El bombardeo se ha producido después de que el Ejército sirio anunciase el fin de la tregua que imperaba en el país árabe desde hace una semana.

El acuerdo de cese de hostilidades, que había sido puesto en práctica tras un pacto entre EEUU y Rusia, se había respetado de forma muy precaria. Además, todo indicaba que estaba herido de muerte después del bombardeo estaodunidense en que por error murieron 62 soldados sirios el pasado sábado. El ataque fue duramente criticado por las autoridades rusas.

El convoy humanitario, formado por una treintena de camiones, se encontraba en la localidad de Auram al Kubra, en la provincia de Alepo. Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos un total de cinco misiles, lanzados por aviones del Ejército sirio o ruso, han impactado contra los camiones que estaban estacionados frente a la sede de la Media Luna Roja. La mayoría de los fallecidos son conductores de los vehículos.También ha perdido la vida un empleado de la Media Luna Roja. El convoy transportaba suministros a las 78.000 personas atrapadas en Auram al Kubra.

Además de este ataque, el Observatorio contabilizó un total de 40 bombardeos más en la zona de Alepo con un balance de 32 muertos.

AVANCE MILITAR

Horas antes de la ofensivas aéras, el presidente de Siria, Bashar al Asad, consideró “una agresión flagrante” el bombardeo llevado a cabo el pasado sábado por aviones de la coalición anti-Estado Islámico liderada por EEUU en el que murieron más de 60 soldados sirios. El ataque permitió un avance de las tropas del grupo yihadista, y puso al límite la tregua en el país árabe.

Asad consideró este incidente (que Washington sostiene fue un accidente) un ejemplo de cómo “las partes hostiles a Siria usan sus energías y recursos para mantener la guerra terrorista en Siria”, según la agencia oficial siria de noticias, Sana. “Cuando el estado sirio logra avances tangibles sobre el terreno o en reconciliación nacional, aquellos estados hostiles a Siria aumentan su apoyo a organizaciones terroristas”, agregó. 

Durante los siete días que ha durado el alto el fuego a las zonas asediadas de Alepo no ha llegado ayuda humanitaria. Lo único que se ha recibido en los últimos días al este de Alepo, la parte de la ciudad siria bajo el control de grupos opositores al régimen de Damasco, han sido bombas. “Ayer (en referencia a este domingo) hubo bombardeos”, confirmó a este diario una fuente médica. En concreto, cuatro bombardeos aéreos que afectaron a los barrios orientales de Karam Al Jabal, Al Shaar y Al Sakhour.  

Según el vicesecretario general de la ONU para Asuntos Humanitarios, Stephen O'Brien, “hasta 275.000 personas están atrapadas (en Alepo) sin comida, agua, tratamiento médico o alojamiento en condiciones”. El diplomático también lamentó que “millones de civiles sirios continúan enfrentándose a carencias y a violencia, en especial aquellos atrapados en zonas asediadas”.

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