La policía cree que el autor del tiroteo de Arizona actuó en solitario

Los investigadores del tiroteo perpetrado el sábado en la ciudad estadounidense de Tucson (Arizona) creen que Jared Loughner, el joven detenido como autor de la masacre que ha causado 6 muertos y 14 heridos, actuó de forma premeditada y en solitario. La policía basa su hipótesis en diversos documentos hallados en el domicilio de Loughner, que hoy comparecerá ante un tribunal federal en Phoenix. Las autoridades federales le imputan cinco cargos criminales; dos por homicidio --el de un juez federal y el del asistente de la congresista demócrata Gabrielle Giffords-- y tres por tentativa.

Las autoridades también sospechan que el joven, de 22 años, actuó solo y descartan vínculos con grupos antigubernamentales o xenófobos. La persona que en un primer momento la policía consideró un posible cómplice era en realidad el taxista que le dejó en el lugar de los hechos, antes de perpetrar la matanza. Los investigadores han señalado que no hay ningún vínculo entre el taxista y el atentado.

El presidente de EEUU, Barack Obama, ha convocado a la población a guardar hoy un minuto de silencio a las 11 de la mañana hora local (17.00 horas en España) en memoria de las víctimas del tiroteo.

Loughner comparecerá ante la justicia a las 14.00 horas (22.00 horas en España), según ha confirmado el departamente de Justicia. La defensa del joven ha sido asignada a la abogada Judy Clarke, que ya defendió a Ted Kaczynski, más conocido comoUnabomber, el hombre que desde 1978 y durante 13 años envió 16 bombas a objetivos aleatorios. Mató a 13 personas y actualmente cumple cadena perpetua.

Fijación por la congresista

Según apunta la investigación, Loughner había desarrollado una fijación por la congresista Giffords al tiempo que su salud mental se deterioraba. En una caja en el domicilio de sus padres, la policía ha hallado un sobre con las palabras "sigo con mis planes", "asesinato" y el nombre de Giffords. En la misma caja, había una carta del 2007 en la que Giffords agradecía a Loughner su asistencia a un mítin en Tucson.

La policía considera que el tiroteo tenía a Giffords como principal objetivo y ha descartado que el juez federal John M. Roll, que murió en la masacre, fuera un blanco previsto con antelación por Loughner. Roll, que había recibido amenazas, acudió al mitin de Giffords el sábado porque quería hablar con la congresista sobre el importante volumen de casos federales existentes en Arizona.