Jóvenes de L'Hospitalet realizarán el censo de vencejos comunes y reales

L’Hospitalet ha puesto en marcha un proyecto de conservación de vencejos comunes y vencejos reales con la colaboración de centros de enseñanza de la ciudad, que elaborarán un censo de nidos urbanos protegidos en el municipio.

Con esta iniciativa, de la que se encargan los servicios municipales de Limpieza y Medio Ambiente y Juventud, se favorece la preservación de dos aves protegidas y se conciencia a la juventud sobre la importancia de la conservación de la fauna en el medio urbano a través de un proyecto de aprendizaje y servicio.

Los vencejos comunes y los vencejos reales son aves insectívoras protegidas que suelen vivir en el ámbito urbano y que instalan sus nidos en el interior de los agujeros de ventilación de las medianeras de los edificios. Las intervenciones de derribo y rehabilitación de edificios terminan con estos nidos. El objetivo del censo ofrece la posibilidad de conservar los nidos en el momento en que un edificio se tenga que derribar o rehabilitar.

Además del interés medioambiental para conservar la biodiversidad urbana de la ciudad, las poblaciones de estas aves ayudan al control de plagas de insectos, como el mosquito tigre.

Gracias a las características de edificación, L’Hospitalet tiene una de las poblaciones de vencejos más importantes de Catalunya, mientras la tendencia en otros municipios y en Europa es de retroceso.

Este censo ayudará a proteger los nidos de estas aves migratorias. Para su elaboración, se ha establecido la colaboración de cuatro centros de enseñanza de diferentes puntos de la ciudad: el centro de estudios Joan XXIII, el centro educativo Balaguer, el Instituto Santa Eulàlia y el Instituto Eugeni d'Ors.

Los alumnos que participan asisten hasta final de mes a sesiones teóricas en las que se les enseña a localizar e identificar estas aves y sus nidos y se les informa de su hábitat y ecología y de la importancia de su presencia para al ecosistema urbano.

A principios de mayo harán una salida de formación y, posteriormente, a cada centro se le asignará una zona determinada de la ciudad y los jóvenes saldrán por grupos para registrar los datos en unas fichas con las que se elaborará el censo.

Una vez finalizado el trabajo y grabados los datos, se remitirá el censo a la Dirección General del Medio Natural y Biodiversidad de la Generalitat para hacerlos llegar a los agentes rurales responsables de la gestión directa de la protección y conservación de la fauna salvaje.

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