EN CONCIERTO

Antonio Arco: "Venir a L'Hospitalet es como volver a casa"

Antonio Arco estará en concierto el próximo 11 de febrero en Salamandra 2.

Antonio Arco estará en concierto el próximo 11 de febrero en Salamandra 2. / periodico

MANUEL ARENAS / L'HOSPITALET DE LLOBREGAT

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Antonio Arco (Loja, 1976) es eso. Lleva haciendo canciones desde los 9 años: la música para Arco siempre fue un asunto serio. Cuando sus compañeros de clase jugaban en el recreo, él ya había decidido que tenía un algo de inspiración; que ir contra corriente era su condición: “¡Qué penita no poder ser lo que quieres ser!”, sentenciaba en Sevillanas Hipotecadas. Después de 7 discos con El Puchero del Hortelano, Arco se embarcaba en una nueva aventura en solitario: Uno (Warner Music), disco cuya gira fue presentada hace un año por el propio Arco en este periódico y que, por ser su ilusión, iba a ser también su guía.

Ahora el cantante aterriza en L’Hospitalet para culminar la gira de Uno y vuelve a hablar con EL PERIÓDICO: “Venir a estas tierras es, en cierta medida, como volver a casa. Aquí hemos vivido noches muy especiales [“Allí donde fue querido siempre gusta de volver”], y que el público te vuelva a dar la oportunidad de seguir haciéndolo es una maravilla”. El próximo 11 de febrero, la Sala Salamandra 2 le despedirá en directo hasta nuevo aviso.

“EL GUSANILLO”

En Uno, Arco deja atrás definitivamente los ritmos propios del flamenco puro –“algo que ya se venía notando en los últimos discos de El Puchero”, puntualiza- y se mete de lleno en el sonido acústico: “En mi casa siempre he escuchado flamenco, pero también me he criado con Dylan, Clash, AC/DC o José Luís Perales. Se trata de dejarte llevar por lo que te pide el momento; no he salido del flamenco de manera premeditada, y no descarto volver a pintar con sus colores alguna canción de las venideras”, afirma el andaluz, para quien últimamente sólo hay días que sí.

Le canta a su madre –“Siento el tiempo que no invierto en quererte, y no es por falta de interés”-, al equilibrio, al reverso de la cara (que inevitablemente es la cruz), a las verdades e incluso se anima a hacer un alegato nada dudoso: “Y habrá que escuchar lo que te diga el transgresor y transgredir lo que es injusto sin pavor”.

-¿Cree que cuando tenga 80 años querrá vivir otros 80?

-Es difícil saberlo ahora que tengo la mitad de esos años, pero sí puedo decir que por ahora intento tomar decisiones valientes y arriesgadas y salir de mi zona de confort continuamente. Hay pocas cosas que se me pasen por la cabeza  y que no decida hacer por miedo o desgana [“Es que ahora no hay quien me pare”, decía en Mañana no se sabe]; no entiendo la vida sin ese gusanillo, sin esa ilusión cada día.

La música de Antonio Arco se define por la resaca que deja, por la profundidad de sus letras –crudas, prácticas, sin ñoñerías ni rimbombancias superfluas-, sobre las que asegura que no versa una rutina fija: compone en ese rato tan divino, cuando asoma la idea, en un desvelo, en la playa o conduciendo, sin documentarse demasiado porque el Antonio cantante revive a través de sus letras lo que el Antonio persona ya vivió. Ahora bien, sus composiciones, según explica, no escapan de la eterna revisión a la que se somete cualquier sentimiento plasmado por un ser humano: “A medida que pasa el tiempo me gustan menos algunas frases que pudieron ser mejor expresadas”.

EL 2º DISCO EN SOLITARIO, EN EL HORNO

-¿Qué le llevó a dejar El Puchero? Quizás el egoísmo del letrista?

-Yo ya firmaba mis canciones como propias en El Puchero; lo dejamos por varias razones y puede que ésa sea, en parte, una de ellas: no entendida por la parte del “egoísmo”, que seguramente también la tiene, sino por querer plasmar mis canciones tal y como son concebidas en mi cabeza, sin la ‘presión’ ni el necesario consenso que exige una banda.

El cantante ve muy difícil que el grupo vuelva a resurgir de sus cenizas algún día, si bien deja la puerta abierta a poder colaborar en algún momento con, por ejemplo, Patricia Ramos, la guitarrista de El Puchero, a la que considera “una fuera de serie; una artista de una calidad extraordinaria y una persona llena de bondad y generosidad”.

 “Ya estamos comenzando a gestar el nuevo álbum. Por ahora tenemos una veintena de canciones”, cuenta Arco. Al volver de la gira por América empezarán a grabarse y la intención del cantante es ofrecer un primer adelanto en otoño de este año: “Os puedo adelantar que estoy muy contento e ilusionado con mis nuevas creaciones y que los que las han escuchado dicen tener el mismo sentimiento; creo que va a suponer otro paso más adelante y quizás en algunas canciones otra mirada atrás, pues hay algunas de ellas que vuelven a beber en cierta medida de influencias a las que he prestado menos atención en estos últimos años”, concluye.

-Voy a callarme porque [ya casi] es sábado.

-Muchas gracias por la entrevista.

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