La línea de tren de Puigcerdà tendrá un semidirecto

Tras tomar las riendas de Rodalies hace apenas dos meses, la Generalitat ha empezado a tomar decisiones para mejorar algunos servicios. Una de las zonas prioritarias será la que engloba el Ripollès y la Cerdanya, donde se reducirá el tiempo de viaje entre ambas comarcas y Barcelona con un nuevo tren semidirecto. La medida aliviará uno de los históricos puntos negros de Rodalies, donde se necesitan más de tres horas para recorrer 150 kilómetros.

De momento, el Govern está estudiando la posibilidad de aplicar un paquete de medidas en la línea 3, que une BCN con Puigcerdà, y que podrían entrar en vigor antes del verano. El objetivo pasa por reducir el tiempo de desplazamiento desde Ripoll y Puigcerdà hasta el área metropolitana y, de paso, aumentar el número de usuarios. Según datos de la Conselleria de Política Territorial, el año pasado la línea tuvo 419.000 viajeros en el tramo Vic-Puigcerdà, y 5.972.000 en el de L’Hospitalet-Vic.

DOS PARADAS / La principal novedad será la incorporación de un tren semidirecto, en las dos direcciones, que no parará en ninguna de las estaciones pequeñas del trayecto. Ambos trenes se detendrán, como mínimo, en Ripoll y Vic. Uno de los convoyes partirá a primera hora de la mañana de Puigcerdà en dirección Barcelona, y el otro realizará el viaje en sentido contrario a última hora de la tarde. La oferta complementará la que ya existe a lo largo del día, con seis trenes de ida y vuelta.

Durante años, la incorporación de un tren semidirecto ha sido ampliamente reivindicada desde el territorio. De la mano de CiU, la demanda ha pasado por el Congreso, la Diputació de Girona y el Parlament. Una mejora adicional consistirá en el aumento de la velocidad en algunos tramos, básicamente entre Ripoll y Puigcerdà. Esta actuación ya es viable tras las obras que se han realizado en los últimos meses.

Con estos dos cambios, y según Marc Garcia, técnico responsable de Rodalies, la Generalitat persigue reducir «de manera importante» el tiempo empleado en el trayecto entre Puigcerdà y Barcelona, que a día de hoy supera las tres horas.

Por último, también está en fase de estudio la mejora del confort de los convoyes. «El parque móvil actual de la línea está adaptado a tramos de corto recorrido, de una hora o poco más. Una solución sería incorporar algunos trenes de media distancia», apunta Garcia.