LOS SECRETOS DE LAS FLAMANTES MADRES FAMOSAS

Parturientas y divinas

La recuperación tras el parto es larga y difícil, menos para decenas de celebridades

33 Pilar Rubio.

33 Pilar Rubio.

OLGA PEREDA
MADRID

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Perder peso tras el parto es un proceso «muy largo y difícil», afirmación médica que, sin embargo, no parece encajar con algunas parturientas-diosas cuyos extraordinarios y recuperados cuerpos -sin un átomo de grasa- están llenando este verano las páginas de la prensa rosa, provocando serios e injustos complejos entre el común de las mortales. Eugenia Silva (que a los dos meses escasos de parir mostró su increíble figura en una revista femenina), Elsa Pataky (que se dejó ver tan en forma como siempre a las tres semanas de dar a luz mellizos), Pilar Rubio (que se enfundó unos ajustadísimos leggins un mes y medio después de ser mamá) y Stacy Keiber, la ex de George Clooney (que afronta la recta final de su gestación cual gurú del embarazo light) son algunas de las famosas mamás que parecen contradecir la relación directa que hay entre tener un hijo y ganar grasa y flacidez. ¿Hablamos, pues, de milagros? No exactamente.

Según Jorge Planas, especialista en cirugía plástica y estética y director médico de la Clínica Planas, la pronta recuperación física tras el parto tiene dos claves. La primera: no engordar mucho durante el embarazo. «No es lo mismo ganar 10 kilos que 30. Las secuelas estéticas en piel, pecho y abdomen son completamente diferentes», advierte. Silva, por ejemplo, admitió haber engordado 17 kilos, tres menos que Rubio. «Le doy el pecho a mi hijo y tengo un hambre feroz. Aún no puedo hacer dieta o gimnasia», comentó la modelo en Yo Dona, donde lució unos biquinis de infarto a los dos meses de parir.

La segunda clave del éxito para la pronta recuperación es, añade Planas, acudir a especialistas para seguir un plan posparto. Conocidos en EEUU como los Mommy makeover, son programas que incluyen a nutricionistas, fisioterapeutas, médicos estéticos y cirujanos plásticos. Estos últimos, destaca el especialista, «a veces intervienen y a veces no». Si lo hacen, estamos hablando de muchos meses después de dar a luz. Sus tratamientos van desde la elevación de mamas hasta la abdominiplastia (para recuperar el vientre plano) o la liposucción (que elimina las células grasas más rebeldes).

Ninguna mujer puede salir del paritorio y, al día siguiente, emprender la aventura de ponerse en forma. Incluso para el paso más light, como seguir una dieta, hay que esperar un tiempo. Meses. Especialmente, si es madre lactante, actividad que, como bien recordó Pataky tras dar a luz a sus mellizos, gasta calorías pero también implica una ingesta extra de alimentos.

El director médico de la clínica Planas explica que no solo la dieta sirve para recuperar la figura sino la gimnasia. Pero no cualquier gimnasia. En los Mommy Makeover, «los fisioterapeutas comienzan por enseñar técnicas de respiración y otras para mejorar el dañado suelo pélvico. Para mejorar el abdomen, se practican hipopresivos y, más adelante, electromusculación». Desde hace dos meses, Rubio (que antes y después de dar a luz realizó pilates) dedica dos horas a la semana a los hipopresivos, definidos por ella misma como «unos abdominales, pero para dentro».

Mientras, Sara Carbonero -que dio a luz en enero y en junio protagonizó un reportaje en ¡Hola! donde no se veía ni rastro de grasa- confesó en su blog que la electroestimulación (otra de las técnicas incluidas en los Moomy Makeover que consiste en el movimiento de todos los músculos gracias a unos electrodos) le ha ayudado mucho a la hora de recuperar su ya de por sí increíble figura.

«Los milagros no existen», dijo Carbonero utilizando la misma expresión que Pataky. «No he recurrido a la cirugía. Lo que hay que estar es en forma. Y es importante estarlo antes de quedarse embarazada. El cuerpo y el músculo tienen memoria y se recuperan enseguida. Durante el embarazo también practiqué pilates, yoga y natación. Sin sobrepasar las pulsaciones», aseguró la actriz, convertida a gurú de la vida sana y el deporte, algo que también se puede aplicar a Keiber.

 

La ex de Clooney ha dicho: «El embarazo «no es la excusa perfecta para comer donuts». Cualquier cosa que come la actriz, modelo y exluchadora profesional es ecológica, al igual que sus cremas. «Todo lo que me pongo en la piel, básicamente me lo puedo comer», sentenció.