El tigre de Gales repasa su vida en un libro
Jones 'borra' su vida sexual en sus memorias
La autobiografía del cantante no menciona sus correrías en 500 páginas
A Tom Jones parece fallarle la memoria. El incombustible cantante galés ha olvidado por completo en la autobiografía que acaba de publicar su larga trayectoria de seductor y cazador de cada dama que se ponía tiro. El hombre que en otro tiempo alardeó de haberse acostado con 250 fans en el momento cumbre de su carrera hace ahora un canto al amor conyugal. A lo largo de las 500 páginas de 'En la cima y de vuelta', que publicó la semana pasada, no hay una sola referencia a sus correrías extramaritales. El antiguo minero de 75 años muy bien llevados niega explícitamente haber tenido un affaire con la exuberante Raquel Welch y no dice una palabra de las sonadas relaciones que mantuvo con Miss Mundo, Marjorie Wallace, y con la cantante del conjunto Supremes, Mary Wilson. Unas conquistas de las que la prensa británica publica testimonio gráfico estos días, como prueba irrefutable de su existencia. Por no mencionar, en la obra ni siquuiera menciona a un hijo ilegítimo, Johnathn Berkery, de 27 años. Jones solo comenzó a pagar por el mantenimiento del niño cuando su madre, la modelo americana Katherine Berkery, le llevó a los tribunales y una prueba de ADN demostró que era el padre.
En las entrevistas que ha concedido promocionando el libro, el galés ha declarado una y otra vez su amor por Linda, la mujer con la que se casó cuando tenían 16 años. «Ella sigue siendo el amor de mi vida», afirma, y asegura que se le ha malinterpretado cuando dijo a una revista que a estas alturas a ella «le falta chispa». «Yo no he dicho eso. Ella cree que le falta chispa porque tiene un enfisema. No es lo mismo». Él, en cambio, bronceado y musculoso, sigue al pie del cañón después de haber vendido 100 millones de discos.
Jones siempre fue sexi, una bomba sexual en realidad. Pero su estilo lascivo y provocador en el escenario, cuando las mujeres le arrojaban prendas íntimas por decenas, ha cambiado radicalmente. Su 'look' actual, más acorde con los años, se lo debe en gran parte a su hijo Mark, -éste sí, oficial y legítimo- que se convirtió en los 90 en su mánager. Aquel arreglo familiar fue un éxito absoluto y acabó con la decadencia en la que había caído a finales de los 70, relegado a la actuación en casinos y restaurantes de Las Vegas. Su repertorio y su música también se han modernizado gracias a la selección de un grupo de modernos productores desde 1999, cuando con Reload volvió a colocarse a la cabeza de las listas de ventas.
DESPEDIDO DE 'LA VOZ' / Incansable, sir Tom, gracias al título que le concedió la reina, además de publicar el libro ha sacado estos días un nuevo disco, Long lost suit case, e inicia una gira por el Reino Unido que tendrá como broche de oro un concierto junto a Van Morrison en el O2 de Londres. Una actividad desbordante que le hará olvidar el fiasco que sufrió en agosto, cuando la BBC lo despidió sin ceremonias como jurado en el concurso 'La Voz', donde llevaba cuatro años, para dejar hueco a Boy George y Paloma Faith. Se cuenta que el veterano cantante había pedido un millón de euros por seguir esta temporada y la cadena le mostró la puerta de la calle.
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