iniciativa en defensa del patrimonio inmaterial de la unesco

La dieta mediterránea como mejor mantel

Decenas de locales lucen el sello que avala su apoyo al patrón alimentario

El sello de la dieta mediterránea luce en la cocina del restaurante Disfrutar, en la barcelonesa calle de Villarroel.

El sello de la dieta mediterránea luce en la cocina del restaurante Disfrutar, en la barcelonesa calle de Villarroel.

FERRAN IMEDIO / ARCELONA

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la dieta mediterránea y todo lo que significa se ha puesto de moda en los últimos años más allá de la cuestión puramente gastronómica, aunque lleva siglos ahí, manteniendo todas las virtudes que ahora se ensalzan: es saludable, sabrosa, sostenible, variada, nutritiva... Pero de un tiempo a esta parte, ayudada por el tirón gastronómico de países como España, tiene un reflejo institucional que se manifiesta en ejemplos como su distinción, hace cinco años, como patrimonio inmaterial de la humanidad según la Unesco.

Otro buen ejemplo es el MedDiet, un proyecto enmarcado en los programas estratégicos de la Unión Europea que promociona y difunde las bondades de la dieta mediterránea. España, representada por la Fundación Dieta Mediterránea (FDM), Egipto, Grecia, Italia, Líbano y Túnez participan en el plan.

Una de las acciones que lleva a cabo la FDM son los certificados que expiden a los restaurantes que cumplen con el canon que se espera de este recetario, que en líneas generales implica un  consumo alto de productos vegetales (frutas, verduras, legumbres, frutos secos), pan y otros cereales (sobre todo trigo), aceite de oliva, vinagre y vino en cantidades moderadas. La iniciativa se empezó a llevar a cabo en primavera, y ya son 40 los establecimientos que han conseguido el sello distintivo. Desde la FDM, sostienen que el objetivo de esta idea es «potenciar» las figuras de los chefs y los restaurantes porque «son los embajadores del modo de alimentarse».

En Barcelona, por ejemplo, han sido distinguidos 24 restaurantes: Tapeo, Dos Palillos, Restaurante CETT, Bonanova, La Fonda del Port Olímpic, Speakeasy, El Suquet de l'Almirall, La Taverna del Clínic, La Fonda Gaig, Bodega 1900, Via Veneto, Merendero de la Mari, L'Escola (ESHOB), Windsor, Ca l'Isidre, Cal Pep de les Olles, Passadís del Pep, Tannic by Freixenet, Rías de Galicia, Taverna Hofmann, Sagardi Cocineros Vascos, Disfrutar, La Llavor dels Orígens y Dos Pebrots. Aparecen en un libro-guía que ofrece una completa panorámica dieta mediterránea a través de ilustraciones.

Además, está el estudio Predimed (Prevención con la dieta mediterránea). Integrado por prestigiosos y reconocidos investigadores que coordina el doctor Ramon Estruch, considerado una autoridad científica en esta materia, ha probado los efectos beneficiosos de la dieta mediterránea en la salud. Sus resultados han tenido gran eco internacional.

Hay más iniciativas. El Ministerio de Agricultura y Alimentación celebró del 21 al 27 de septiembre la Semana de la Dieta Mediterránea, con acciones en varias ciudades: actividades infantiles, ponencias, demostraciones culinarias, promociones en mercados y supermercados...

La dieta mediterránea tomará aún más impulso con la iniciativa Paralelo 40º. Observatorio mundial de la Dieta Mediterránea, que pretende englobar bajo la misma etiqueta a las regiones ubicadas alrededor de los paralelos 40º al norte y sur del Ecuador (Argentina, Japón, Sudáfrica, Australia…), donde se cultivan alimentos típicamente mediterráneos como la tríada trigo-vid-olivo. Como la latitud en este caso es más importante que la proximidad al mar, se universalizaría y potenciaría este patrimonio gastronómico.