VISITA PRIVADA AL LOUVRE DE LA DIVA DEL POP

Beyoncé, 'selfie' VIP con La Gioconda

Beyoncé y Jay-Z emulando la escultura 'El amor de Psique'.

Beyoncé y Jay-Z emulando la escultura 'El amor de Psique'.

EVA CANTÓN / PARÍS

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Sin colas y sin gente. Así fue la visita VIP que Beyoncé hizo al Museo del Louvre el pasado 7 de octubre junto a su esposo, el rapero Jay-Z, su hija, la pequeña Blue Ivy, y una cohorte de guardaespaldas que no aparecen en el ramillete de fotos que la cantante norteamericana ha compartido con sus fans en su web oficial y en Instagram, atestiguando su particular visión del arte.

Tras poner fin a la gira On the RunBeyoncé hizo escala en París y se regaló un desenfadado paseo vespertino por el antiguo palacio de los reyes de Francia, uno de los mayores museos del mundo que, tras cerrar sus puertas al público, las abrió para que la estrella y sus acompañantes se movieran libremente por sus inmensas salas. Parece que lo hicieron. Posaron ante la mítica y enigmática sonrisa de La Gioconda intentando imitar el gesto inimitable que le dio Da Vinci. También se inmortalizaron en un claroscuro subiendo la escalinata que conduce a la imponente Victoria de Samotracia o contemplando los detalles de La coronación de Napoleón, de Jacques Louis David. La reina de los selfies sacó igualmente partido a la parte escultórica del Louvre adoptando la postura de las figuras de mármol blanco.

Y se diría que la niña, captada discretamente en las fotos, se divirtió con la experiencia. Sobre todo cuando descubrió en el suelo una rejilla de ventilación que hizo aletear su vestido rosa, un poco al estilo de Marilyn Monroe. La prensa francesa especula ahora con la idea de que Beyoncé y su familia habrían sucumbido al glamur parisino y estarían buscando casa en la capital francesa, porque se les ha visto visitar algunos edificios situados en los mejores barrios de París.