Angela Merkel se relaja en Italia

La cancillera alemana Angela Merkel ha dejado aparcadas por unos días las estresantes reuniones políticas y ha puesto rumbo a Italia, concretamente a la isla de Ischia, frente al golfo de Nápoles, para relajarse durante la Semana Santa en un balneario.

Merkel y su marido, el químico Joachim Sauer, son habituales del Hotel Sant'Angelo, en la localidad de Serrara Fontana, desde hace más de 10 años. Los responsables del hotel siempre tienen reservada la misma habitación para el matrimonio, que aprovecha su estancia en el establecimiento para disfrutar de los baños termales y los diferentes tratamientos que ofrece el balneario. El hotel tiene una terraza con vistas al mar en la que la pareja suele cenar y sus precios son muy asequibles, la media pensión en esta época cuesta 68 euros por persona y día.

Antes de alojarse en Ischia, la cancillera y su esposo visitaron en Nápoles las ruinas de Pompeya, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1997. Allí fueron fotografiados mientras recorrían el recinto y comprobaban in situ, los destrozos causados en los restos arqueológicos por las lluvias. La pareja permaneció en Pompeya más de tres horas y fue la propia Merkel quién pagó la entrada para ella, su esposo y los guardaespaldas.

La política alemana y sus acompañantes comieron comida italiana en un restaurante de la ciudad de Pompeya antes de dirigirse a Pozzuoli, parada obligada para embarcar con destino a la isla de Ischia, donde ahora descansa.