redes sociales

La modelo que canceló el perfil de Instagram emprende una nueva vida virtual

La australiana Essena O'Neill que denunció en un vídeo la "falsedad" en la que habia vivido ahora promueve el veganismo

JOAN GUILLÉN GARFIAS / BARCELONA

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Cancelar el perfil de Instagram supuso para Essena O'Neill un mar de lágrimas aparente. Asegura que vivió una pesadilla de mentiras en los últimos años y que por ello había decidido dar un giro a su mundo virtual. La joven australiana, de 18 años, que decidió cerrar la cuenta en la red socialcerrar la cuenta red social InstagramInstagram y su canal de Youtube, ha aprovechado la tormenta mediática creada con sus denuncias a Instagram para crear una página web llamada 'Let's be game changers' (Vamos a cambiar el juego). Con esta nueva plataforma O'Neill quiere promover los principios del vaganismo, el cuidado medioambiental o la salud mental y física, entre otros "temas reales y originales".

O'Neill ha asegurado que algunas marcas de ropa le pagaban miles de dólares por mostrar en sus fotografías sus prendas. "Ganaba 1.300 euros fácilmente" por un 'post'. Ahora pretende lo mismo pero desde otros puntos de vista. La mayoría de los seguidores de O'Neill le han mostrado su apoyo en su decisión de rebelarse contra las tendencias que imponen las redes sociales. Incluso el número de seguidores (o 'followers', como se les conoce en el ámbito de las redes) se vio incrementado. Essena O’Neill ha invitado a sus seguidores a "hablar de lo que de verdad importa" en la vida, afirmando que no quiere pasar más horas comparándose con los demás, pero sí "conseguir algo radical, trascendental".

REINA DE LAS REDES

La decisión de abandonar Instagram se realizó 24 horas después de que la modelo colgara en la red un vídeo donde confesaba que todo lo que se veía en dichas fotografías era "una mentira". O'Neill, hasta ahora una 'reina de las redes', había colgado más de dos millares de imágenes en su cuenta. Entre las que predominaban los 'selfies' y las fotografías que mostraban una idílica realidad y un envidiable estilo de vida. Sus seguidores le correspondían con centenares de "me gusta" en cada una de las publicaciones. Pero la joven no ha podido continuar con el 'cuento falso' que se había construido en Instagram.

LA VIDA REAL

"Las redes no son la vida real" asegura, ahora, la joven. "No quiero apoyar a redes sociales con las que no estoy de acuerdo y que hacen miles de millones en publicidad". Por este motivo la modelo eliminó, a finales de octubre, más de 2.000 fotografías que "no sirvieron para otro propósito que no fuera la autopromoción". Además, Essena O'Neill reescribió algunos pies de fotografías que no había borrado para explicar la verdadera historia de cada retrato."Estómago succionado, pose estratégica, pechos subidos. Quiero que las chicas jóvenes sepan que esto no es una vida sincera, 'cool' o inspiradora. Es perfección forzada para recibir atención", "Hice más de 100 fotos en poses similares para lograr que su vientre se viera bien" o "apenas había comido aquel día" son algunas de las confesiones.

CERRAR UN PERFIL Y ABRIR OTROS

Finalmente la joven ha cumplido con lo dicho y ha cerrado su perfil. "Es un sistema basado en la aprobación social, en los 'me gusta', en la validación de puntos de vista, en el éxito en el número de seguidores", así denuncia, actualmente, los "dañinos" ideales que quieren "imponer" las redes sociales.

CONFESIONES

La adolescente afirma que desde los 12 años ha estado queriendo ser alguien que no era. "He pasado horas viendo a chicas perfectas en internet, deseando ser ellas. Cuando me convertí en una de ellas, no era feliz, no estaba satisfecha ni en paz conmigo misma", asegura. También testifica que era una incondicional de las redes y que no era consciente de ello, al igual que "cualquiera que sea adicto". Por este motivo ha pedido perdón por engañar pero afirma que "no lo hacía conscientemente" pues "estaba obsesionada con gustar a los demás".