Lehman Brothers resucita y ahora es un whisky

Lehman Brothers murió en Wall Street Lehman Brothers Wall Street pero ha resucitado en Londres. Tranquilos; el redivivo no es uno de los mayores bancos de inversión que se derrumbó en la peor quiebra de la historia de EEUU, en septiembre del 2008, provocando la crisis financiera mundial de la que aún no sabemos cómo escaparemos. El resucitado con ese nombre es un destilado que solo tiene de ruina la etiqueta. Se trata de un licor impulsado por un joven empresario británico, James Green, empecinado en defender que se puede hacer negocio con una nomenclatura tan aciaga.

Frente a los críticos que piensan que llamarle Lehman Brothers a un whisky, evocando algo calamitoso, es una chaladura, Green se defiende así en una entrevista con 'The Wall Street Journal': "Es una marca explosiva con gran valor intrínseco". Según el empresario, de 34 años, "transmite gusto por la historia". Sí, de una historia bien negra. Pero también es verdad que Lehman Brothers no está sola en el mundo de las bebidas asociadas a un tema desatroso. El mismo rotativo recuerda el caso del lanzamiento, en el 2011, del whisky irlandés 'Titanic' con motivo del centenario de su hundimiento.

DESTILADOS EN ESCOCIA

Lejos de la bancarrota, Green ya suministra a diferentes bares a uno y otro lado del Atlántico, en barras londinenses y neoyorquinas. El empresario se ha aliado con destiladores en Escocia, como Angus Dundee, para producir la mezcla de inspiración Lehman Brothers.

La bebida Lehman Brothers se comercializa en forma de tres tipos de whiskys: 'Ashes of disaster' ('Cenizas del desastre'), de botella negra agorera, "cuerpo profundo" y reminiscencias de frutos de otoño y notas de salida melosas; 'Evergreen', con un toque más floral y "que sabe mejor cuando se está sentado en la cima del mundo", y 'Snapfire', ideal para "maniobras imprudentes, apuestas a largo plazo y consecuencias explosivas". La marca, en este caso, aconseja beberlo en solitario.

DESDE 41 EUROS

Los pedidos se pueden hacer 'online'. El 'Snapfire' tiene un precio de 41 euros; 'Ashes of disaster', 46, y 'Evergreen', 75. El lote de los tres sale por 187. Eso sí, de momento, de los dos primeros anuncian que no sirven hasta abril.

James Green tuvo mucha vista hace unos años, en el 2013, cuando registró el nombre 'Lehman Brothers' para bebidas en la oficina de patentes de EEUU (US Patent and Trademark Office). Barclays Bank (BCS), que compró parte de Lehman Brothers, intentó frenar a Green en el 2014 para que no pusiera ese nombre al whisky. Entre los argumentos de Barclays: pues que el banco inversor quebrado solía regalar a sus 'brokers' botellas con whisky  con el nombre de Lehman Brothers grabado en el cristal. De esta forma, el banco defiende que la marca ya se extendía antes a otros productos más allá de la banca. El caso de la marca -habitual también en letras de rap, dibujos animados (sale en 'Gru, mi villano favorito') y en el universo de artistas conceptuales- aún no se ha resuelto en los tribunales, por lo que Green sigue vendiendo a destajo sus botellas.

Es más, ahora busca inversores para abrir bares 'Lehman Brothers' en Wall Street y en Londres.