«Si te organizas, sabes el tiempo que te sobra»

Estrenando siglo, el 14 de mayo del 2000, llegaban al mundo, en Barcelona, Paula y Marc Nueno Montolio. En dos saquitos amnióticos diferentes, sus fetos fueron subiendo al podio en cada nueva estructura genética lograda. Ahora el podio lo pisan sus zapatillas deportivas y sus resultados académios. Cada uno en su categoría de carrera -con preferencia por las de montaña- coleccionan copas y medallas. El Barça los ha fichado. En el aula, tecnología en el caso de él y medicina en el de ella guían brillantes currículums, energetizados por el vigor que -dicen- les aporta correr.

-¿Cuándo fue su primera carrera? Marc- En sexto de básica, un profe nos dijo que si nos apuntábamos a la cursa de El Corte Inglés, nos subiría la nota. Lo hicimos, y nos encantó. No hicimos buen resultado, pero a partir de ahí empezamos a entrenar.

-¿Por su cuenta? Paula- En el colegio, en 6º de Primaria, nos hablaron del club La Cabra Montesa, un grupo de running de montaña que sale a entrenar por Collserola. Al principio eran solo cuatro chicos y un profesor, no había ninguna chica, pero luego me cogieron y ahora somos unos 40 y más de 15 son chicas.

M.- Íbamos a correr a las 7 de la mañana, una hora y media, luego volvíamos a casa, una ducha y a clase. Pero en Bachillerato ya empezamos a entrenar por las tardes, porque entrábamos a clase a las 8. Ahora martes y jueves, lo hacemos con el club, y los lunes y viernes vamos a Montjuïc, a prepararnos con el Barça.

-¿Cómo llegó su fichaje por el Barça? P.- Un día en casa comentamos con nuestra madre esa posibilidad y ella nos retó a conseguirlo de la manera más sencilla. Envió un 'mail' al club y no tardaron en contestar citándonos para una prueba.

-¿Unas 25 medallas y 15 copas cada uno -en carreras por libre o con La Cabra Montesa- hablan de un pulso entre hermanos? M.- Hasta cierto punto sí, como reto. Pero correr, para nosotros, sobre todo significa el equilibrio en nuestra vida, además de una gran fuente de motivación y constancia. Puedes estar cansado de estudiar, vas a correr y regresas agotado físicamente, pero con más capacidad de concentración después, cuando retomas el estudio. Corriendo sacas toda la energía y luego te puedes centrar más, te entrena para saber dejar la mente en blanco. Además, te dices: 'si puedo hacer una carrera de 10 km, también puedo sacarme un examen'.

-¿Les queda espacio para el ocio? M.- Justamente, con el deporte aprendes a planificarte, a organizarte, igual que parcelas el esfuerzo en los entrenos, pensando en lo que quieres conseguir al final, también planificas mejor tu tiempo en todo, según tus objetivos. Yo toco la guitarra y a Paula le encanta leer novelas y libros de medicina, ya empieza a adivinar diagnósticos. Practica con los de casa.

P.- Si te distraes, te falta el tiempo. Pero si te organizas, sabes el tiempo que te sobra.

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-¿Y cómo sienten que puede ser el futuro profesional para los jóvenes de su edad? M.- Yo creo que si trabajas en lo que te gusta, siempre tendrás trabajo. A mí me encanta la informática, y sé que no me importará quedarme toda la noche programando. Ya he construido mi propia impresora 3D, pieza a pieza hechas con 3D también. Y si eres bueno y te gusta lo que haces, la gente te querrá pagar por ello.

-Un estudio sobre maratonianos menores de 18 años es el trabajo de investigación de Paula. Y Marc es cocreador de un reloj que vibra al detectar sonido y luz. Por ello Educaixa le permitió viajar a Silicon Valley. ¿De dónde sacan tanta seguridad? Miramos vídeos motivacionales, de carreras, como ritual antes de las nuestras. 'Rise and shine' de Nike nos gusta mucho.