Puigcercós denuncia un pacto de Estado económico para perjudicar a Catalunya

El candidato de ERC, Joan Puigcercós, ha denunciado la existencia de un pacto de Estado a nivel económico y fiscal para perpetuar el statu quo, que, a su juicio, perjudica gravemente a Catalunya. En concreto, ha asegurado que se trata de un "pacto de hierro" dirigido por un "eje Bilbao-Madrid-Sevilla" y que se fundamenta en mantener los privilegios económicos de estos territorios a cambio de someter a una injusticia económica y fiscal a Catalunya. "Las reglas de juego están establecidas y no pueden cambiarse", ha advertido.

Puigcercós ha participado en el foro de opinión de EL PERIÓDICO Primera Plan@ dos días después de sus polémicas declaraciones sobre el agravio fiscal catalán, en las que afirmó que Madrid es una "fiesta fiscal" y en Andalucía no paga impuestos "ni Dios". El líder republicano ha reiterado que no quiso ofender a nadie y que su expresión fue "coloquial", pero de inmediato ha puntualizado que piensa seguir denunciando la diferencia de "celo fiscal" por parte de la Agencia Tributaria entre Catalunya y otras autonomías.

Sobre ese "pacto de hierro", el dirigente independentista ha manifestado que Catalunya es la comunidad española que soporta que el País Vasco tenga un concierto económico casi de territorio "confederal", y que el centro y el sur de España dispongan de una "economía subvencionada" sostenida por los fondos europeos. "Esta dinámica no se puede cambiar. Cuando Catalunya levanta el dedo para exigir que se reconozca y se respete su esfuerzo fiscal, se organiza un sacramental", ha aseverado.

Lejos de retractarse, Puigcercós ha subrayado que mientras Hacienda "masacra" a inspecciones fiscales a Catalunya, en Madrid y Andalucía las empresas no tiene que superar tantos obstáculos. Una situación que, ha añadido, no solo denuncia él, ya que muchos catalanes de origen andaluz están de acuerdo con sus tesis e, incluso, le han mostrado su apoyo en las últimas horas.

¿Pacto con CiU?

Fuera del debate fiscal, el candidato de Esquerra ha respondido a algunas preguntas sobre su política de pactos poselectorales. Fiel a la equidistancia de CiU y PSC que lleva mostrando hace tiempo, no ha querido confirmar si su objetivo es pactar con CiU, aunque tampoco ha cerrado la puerta a hacerlo. Solo ha reclamado a la federación nacionalista un "cambio de actitud" y que actúe con "las manos limpias y libres", en referencia a su presunta implicación en el 'caso Millet'.

Asimismo, ha dejado claro que ERC no aspira a "sustituir a CiU", sino a ser el referente de la "izquierda nacional catalana", un espacio político en el que hoy, ha señalado, hay muchos votantes huérfanos. "El PSC tiene un problema de rumbo estratégico que se ha agudizado con la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut", ha apostillado, antes de afirmar que en Esquerra se han dado de alta en los últimos meses algunos exmilitantes del PSC.