Alegato médico contra el PPC por asociar inmigración y enfermedad

El PPC se ha metido estos días en un jardín considerable al difundir la tesis de que los inmigrante traen a España enfermedades que ya estaban erradicadas. Una veintena de médicos han suscrito un documento tituladoLa xenofobia, un peligro para la salud públicaque rechaza esa afirmación y acusa a los populares de actuar «con mala fe», «mentir descaradamente» y cometer «una injusticia grave». El grupo desacredita con datos la aseveración, que nació en Tortosa, donde el alcaldable de los populares, Pau Fernández, propuso un centro de acogida y control de enfermedades de transmisión y subrayó que muchos foráneos llegan infectados con tuberculosis o sarampión, dolencias que consideró ya erradicadas en España. Fernández abogó por evitar el coste sanitario que eso podría provocar exigiendo a los extranjeros un control previo al empadronamiento.

Los autores del texto, entre los que se encuentra el médico salubrista Josep Maria Armengou, recuerdan que a la afirmación del candidato en Tortosa se sumaron la presidenta del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, y el alcaldable en Barcelona, Alberto Fernández Díaz, se sorprenden de que las altas instancias del partido -es decir, la dirección que encabeza Mariano Rajoy- no hayan «corregido el disparo» y subrayan que la amenaza es real dado que los populares pueden tener «una cuota importante de gobierno, en diferentes niveles institucionales, a partir del 22 de mayo». Consideran que se ha roto «una frontera»: «Es una falacia hablar de la salud como un peligro público cuando se trata de la de los inmigrantes, algo que es rotundamente falso, que se dice de mala fe. Quien lo dice no está por la equidad entre toda la población».

Los médicos apuntan que el flujo de entrada de inmigrantes se ha detenido drásticamente por la falta de oportunidades laborales y niegan que la tuberculosis y el sarampión estuvieran ya erradicadas hace unos años. Sobre la tuberculosis, destacan que su contagio es mucho más fácil en «entornos empobrecidos e insalubres» y sugieren que la administración debe centrarse en combatir estas condiciones.

AUTÓCTONOS SIN VACUNA/ En cuanto al sarampión, sostienen que la vacuna no es eficaz al 100% y que el hecho de que siga habiendo casos responde tanto a la acumulación de personas susceptibles a la enfermedad como a que algunas familias prefieren no vacunar a sus hijos. El documento precisa que esta actitud es «bastante más frecuente entre personas autóctonas que entre las inmigradas recientemente», y relata que un rebrote en el 2006 respondió a ello.

El colectivo cita un informe de la Obra Social de La Caixa para contrarrestar la supuesta amenaza de los foráneos al sistema sanitario: lo que aportan a los indicadores del Estado del bienestar es superior a los servicios sociales de los que disfrutan.