Una asociación organiza grupos para conversar en otros idiomas

Los interesados practican inglés, francés, chino e italiano por 2 euros la hora

Reunión de inglés de Vennmón en el bar musical Trabanqueta

Reunión de inglés de Vennmón en el bar musical Trabanqueta

ANNALISA PALUMBO / BARCELONA

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Delante de un café o de una cerveza, según las horas, cada semana hay quien se reune para practicar un idioma diferente al suyo. El eje central de estas reuniones es Vennmón, una asociación sin ánimo de lucro fundada hace años por Núria Mercader Rosa, quien afirma: "He viajado toda mi vida, y cuando me despidieron de la empresa en la que me ocupaba del mercado asiático, entendí que no quería perder lo que había adquirido con tantos años de esfuerzo: la fluidez lingüística".

Mercader empezó a buscar gente para practicar chino, inglés, y francés, y se dio cuenta que su deseo era común a más gente. "Muchos quieren utilizar lo que aprenden en los libros. En España se estudia mucho y se habla poco", explica.

Por esto decidió fundar Vennmón. Para acudir a sus reuniones, no es necesario tener un determinado nivel. Solo se requieren ganas de practicar y 2 euros, el coste de cada sesión. Cada cita dura dos horas y si en la primera media hora se comunica en ingles o ruso, en la segunda los participantes se verán obligados a hablar catalán o castellano. "La razón es que estas reuniones están dirigidas tanto a españoles que quieran practicar otro idioma como a extranjeros que se han mudado aquí pero no hablan mucho el castellano o el catalán", sigue Mercader.

Es el caso de Julie Remy, de 26 años, una chica de Bélgica que vive en Barcelona desde hace unos meses. En su trabajo sólo habla francés e inglés. "Vennmón me ha ayudado un montón. Siempre me he sentido cómoda, y eso que no hablaba casi nada", afirma.

Lilia Wu, china de 53 años e intérprete de conferencias, acude a las charlas siempre que puede. "Me apasiona cruzarme con nuevas culturas. En Vennmón también se trabajan aspectos sociales, como pedir por favor una cerveza. En China se pediría a secas, sin por favor", dice.

MAÑANA Y TARDE

Las reuniones se hacen por la mañana en la librería Altaïr (Gran Via de les Corts Catalanes, 616) y por las tardes, en el bar musical Trabanqueta (Mallorca, 329). "Tenemos grupos de inglés, francés y chino. El próximo 28 de mayo a las ocho de la tarde en la Trabanqueta empezaremos con el de italiano", explica Mercader, que siempre busca al menos un nativo para sus citas.

Sergi Muntés, ingeniero de 69 años, lleva un año y medio acudiendo a los grupos de inglés. "Hay gente maja y, aunque son jóvenes, siempre me han aceptado. Seguiré viniendo hasta que me muera", sonríe.