El tamaño del apellido

La empresa familiar adolece aún de un problema de tamaño, según el director general del Instituto de la Empresa Familiar (IEF), Joan Corona. La dimensión, agrega, es esencial porque a mayor tamaño, más recursos y,por tanto, capacidad para soportar todo tipo de avatares y muchos años de crisis.

Corona, que es doctor en Económicas y Empresariales, catedrático de Economía Aplicada y rector honorario de la Universitat Abat Oliba-CEU, mantendrá hoy en el foro Cornellà Creació un diálogo con la redactora jefe de Economía de EL PERIÓDICO, Olga Grau.

El directivo del lobi que agrupa a alrededor de un centenar de los mayores emporios familiares de España, defiende eliminar "los argumentos legales que recomiendan no aumentar de tamaño". Las cuestiones culturales se combinan con otro tipo de barreras como son las mayores exigencias y formalidades que afectan a las compañías de mayor dimensión y, hasta el año pasado, la diferencia de tributación entre las pymes (25%) y el resto de empresas (30%), que desincentivaba claramente el crecimiento de las compañías. Una mayor musculatura facilita a su vez la internacionalización, una de las claves para crecer en la economía globalizada.

El IEF recomienda la fusión entre iguales de un mismo sector lo que, a su vez, implicaría la creación de muchos puestos de trabajo. "Está bien apoyar al emprendedor y hay que seguir haciéndolo, pero también hay que impulsar la uniones y el crecimiento", afirma. Y es que, en esencia, cuanto más grande es una empresa, más puestos de trabajo crea.

Corona, que detallará hoy en el coloquio características que juegan a favor de las empresas familiares, destaca la apuesta por el largo plazo como uno de sus rasgos. Esto hace que, si bien pesiguen también tener ganancias como todas las empresas, «la maximización de los beneficios no sea su objetivo principal», ni su único motor.

El IEF, cuyo presidente actual es Javier Moll, el principal ejecutivo y propietario de Editorial Prensa Ibérica, tiene como socios y en su junta directiva a representantes de compañías como Puig, Planeta, Barceló, Acciona, Nutrexpa, Mango, Inditex, Osborne, Agrolimen, Sener, Mercadona o Catalana Occidente, entre otros. La facturación media de sus miembros es de unos 1.500 millones de euros, el 17,5% del PIB.

Corona, como anterior director académico, fue el responsable de desplegar una red de 36 cátedras de empresa familiar en España, la mayor del mundo, bajo la presidencia del fallecido José Manuel Lara (Planeta). En la red trabajan 200 profesores universitarios que forman a una media de 1.800 alumnos al año en toda España.