HISTORIAS MÍNIMAS

Un sueño hecho cava

Joan Marquès logra que su primer espumoso, Somni d'Aran, sea bebida oficial del Vall d'Aran

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JOSEP M. BERENGUERAS / BARCELONA

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Todo empezó como tantas historias de éxito emprendedor de la presente crisis: un negocio (inmobiliario) que funcionaba, que vio cómo caía la demanda con la crisis, y que finalmente deriva en la aventura del empresario en una nueva firma que hace mucho más feliz a su impulsor. En este caso el protagonista es Joan Marquès; su nueva actividad, la producción de cavas vinos; y su producto de éxito, el cava Somni d'Aran, artículo que se ha convertido en el cava oficial del Vall d'Aran.

En realidad, todo es un poco más complejo, porque en este caso Marquès no quería hacer un cava para la región, sino en honor a su hija, que se llama Aran. "Yo no era cavista ni nada parecido. Pero con la crisis uno gana mucho tiempo para pensar, y cuando nació mi hija, pesé que sería bonito dedicarle un cava en su honor", explica Marquès. Los contactos, los tenía, pues este emprendedor no reside en los Pirineos sino en el Alt Penedès. Con tiempo, maduró la idea, se puso en contacto con diversos cavistas, probó variedades y diseñó un producto a medida de sus gustos. Para el tercer cumpleaños de su hija el cava Somni d'Aran estaba listo, y fue todo un éxito: casi restó protagonismo a la cumpleañera.

El espumoso gustó mucho tanto en sabor como imagen (etiquetas especiales, la botella...). Y Marquès empezó a dedicarle horas al producto. El producto final fue un reserva (mínimo 24 meses), con variedades de macabeo, parellada, chardonnay y xarel·lo, siempre de viñas ecológicas. "Al final, el Consell General d'Aran se enteró de que había un cava que llevaba el nombre de Aran. Se pusieron en contacto conmigo, y fui a hacer una cata. Les gustó, y me propusieron convertirlo en el cava oficial de todos los actos, fiestas y presentaciones que se celebrasen. Firmamos un convenio hace ahora un año", explica.

De producto para aquella fiesta de cumpleaños a negocio. Marquès empezó a tomarse mucho más en serio aquella idea visto los resultados: buen producto, convenio y buenos resultados. "Había gente que lo probaba y me decía que era muy bueno, y que tendría que sacar más variedades de producto. Al final me animé", relata.

Instinto empresarial

Así que decidió apostar por otro cava y por un vino negro (siempre, ecológicos), dentro de una nueva marca bajo la que agrupará todos sus productos: Els Instints. Como reconoce el emprendedor, todo ello no hubiese sido posible de no ser del Penedès. "Lo llevas dentro, y aunque no me dedicaba a ello, sabía quién hacía cada cosa porque en la comarca todos hemos crecido con esa cultura. Desde fuera debe de ser muy difícil entrar, pero para nosotros es fácil".

Marquès no quiere hacer productos en masa, sino cuidar cada vino y cava y que sea de calidad. Por ello vende sus productos en establecimientos contados (restaurantes del Vall d'Aran y de Barcelona como La Llavor dels Orígens El Xampanyet; tiendas como Vinus & Brindis...). "También estamos vendiendo ya en otras comunidades españolas. Muchos son personas que han ido a esquiar a Baqueira, que han probado el cava en algún restaurante, y que piden comprarlo una vez han vuelto", explica. Por ello, además de la venta por internet, también envía su cava a algunos distribuidores de zonas como País Vasco o Madrid.

Els Instints también estuvieron en la feria Alimentaria de Barcelona, para no desaprovechar la oportunidad de la exportación. El resultado fue positivo, y la firma ha contactado con una asesora de exportaciones y con ACC1Ó para empezar la aventura en el extranjero. "El ser ecológico nos abre puertas", dice.

El futuro

Tras el éxito de los tres primeros productos, Marquès ha decidido ya preparar el que será su estreno en vinos blancos. Y, mientras, le da vueltas a su idea de completar el círculo: "Me gustaría poder hacer una selección de bodegas de cada denominación de origen de Catalunya. Tener un producto de cada", señala. Otro proyecto, este sí más relacionado con su otra actividad, es montar algún día una bodega-sala de cultura del vino en su tierra. Tiempo al tiempo para seguir cumpliendo sueños.