Ros Roca paga 2,8 millones por uso indebido de tecnología de la sueca Envac

El desembolso de la indemnización acaba con un conflicto judicial que ha durado más de siete años

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Ros Roca ha hecho efectivo en el juzgado mrcantil número 3 de Barcelona el ingreso de 2,8 millones de euros en concepto de indemnización por daños y perjuicios ocasionados a la compañía sueca Envac. El pago es por el uso indebido de tecnología propiedad de la firma sueca especilizada en sistemas subterráneos de recogida de reisduos. Con el cierre de la transacción finaliza un proceso que ha durado más de siete años y en los que Envac ha visto confirmados sus derechos en todas las instancias judiciales, incluido el Tribunal Supremo.

La cantidad da cumplimiento a la sentencia del jugado mercantil número 3 de Barcelona, que en su fallo de 18 de junio del 2007 condenó a Ros Roca a pagar un 20% de las ventas y adjudicaciones obtenidas por los proyectos ofertados con la tecnología patentada por Envac desde el 5 de enero de 2005 y todas sus extensiones. Los proyectos en los que Ros Roca, presidida por Ramon Roca, empleó indebidamente la tecnología estuvieron localizados en Barcelona, Vitoria, Córdoba y Madrid.

Envac presentó el 16 de marzo de 2006 una demanda contra Ros Roca, S.A. por entender que esta última venía comercializando, instalando y ofertando de forma reiterada sistemas de recogida neumática de residuos donde incorporaba la tecnología protegida por la patente europea nº 1.212.246 (número de publicación en España 2.230.124), sin tener permiso ni autorización de su propietaria.

Se da la circunstancia de que el sistema patentado por Envac supone una notable optimización del proceso de recogida y transporte de residuos urbanos en los sistemas neumáticos, al reducir considerablemente el consumo energético y redundar en una mayor eficiencia en la logística de la recogida.

El Grupo Ros Roca, controlado por la familia Roca, es el principal accionista de la empresa Ros Roca Environement, en la que también participa la familia March