REBAJA FISCAL

La nómina más electoral

El sueldo medio subirá unos 6 euros mensuales, un alza del 0,37%, en lo que queda de ejercicio

Delegación de Hacienda de Catalunya durante la campaña de la renta 2014, que acabó el 30 de junio.

Delegación de Hacienda de Catalunya durante la campaña de la renta 2014, que acabó el 30 de junio.

AGUSTÍ SALA / BARCELONA

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En la nómina de este mismo mes o, en muchos casos, en la de agosto, los asalariados verán incrementarse el importe mensual que perciben como consecuencia del adelanto de la rebaja del IRPF, que ya ha entrado en vigor, a pocos meses de unas elecciones generales. Para el salario medio ordinario, situado en 22.939,98 euros o 1.638,57 mensuales en 14 pagas, según la última encuesta trimestral del Instituto Nacional de Estadística (INE), la rebaja fiscal supone unos seis euros mensuales más, lo que vienen a ser 36 en lo que queda de año o 42 si quedan aún siete pagas pendientes (la de Navidad o si la empresa no practica la nueva retención hasta el mes que viene).

Eso supone un incremento salarial de apenas el 0,37%. En los tramos de renta más bajos y medio-bajos, dará a duras penas para tomarse cuatro o cinco cafés de más. Más del 80% de los contribuyentes se encuentran en un nivel salarial anual bruto de hasta 30.000 euros, según los datos de Hacienda.

En conjunto, esta medida supondrá una inyección a los bolsillos de los contribuyentes, que será mayor en términos absolutos (en euros) cuanto más alta sea la renta.

DINERO PARA EL CONSUMO

El Gobierno estima que esta rebaja fiscal, criticada por toda la oposición que la tacha de electoralista, pondrá en manos de los contribuyentes unos 1.500 millones de euros de más en lo que queda de año. Se trata, según Hacienda, de consolidar la recuperación con más dinero para que consuman los particulares.

Pero ese es el impacto macroeconómico. A nivel individual, el efecto varía, aunque para ocho de cada 10 contribuyentes es muy limitado. Así, una persona soltera sin hijos con 15.000 euros de ingresos brutos al año apenas sumará cinco euros mensuales en lo que queda de año por la menor retención, según los cálculos del Registro de Asesores Fiscales (REAF-REGAF.).

En cambio, un contribuyente en la misma situación que el anterior, pero con una renta bruta anual de 50.000 euros ingresará 42,46 euros más al mes, que son 254,76 euros si le quedan pendientes seis pagas. En cambio, para una nómina de 500.000 euros brutos, la ganancia en salario neto será de más de 790 euros mensuales, que son 4.754,76 más en las seis pagas.

En general, para el conjunto de los trabajadores las retenciones que ahora sufren en sus nóminas bajarán entre 0,40 y 1,95 puntos, según los cálculos del REAF-REGAF. La Agencia Tributaria ha puesto en marcha una herramienta para que cada uno pueda calcular la retención que le corresponde

(https://www2.agenciatributaria.gob.es/wcl/PRET-R151/index.zul).

El Ejecutivo permite a las empresas poner en marcha las nuevas retenciones en la nómina de julio (con efectos desde el día 12 de este mes) o a partir de agosto. Hay empresas que han decidido que ya practicarán la nueva retención este mismo mes.

En este caso, aunque el trabajador solo recibirá una nómina, en la trastienda, el departamento de recursos humanos de la empresa tendrá que trabajar como si hiciera dos liquidaciones: una con un tipo de retención un poco superior para el periodo entre el 1 y el 11 de julio, adaptada a la tarifa que regía hasta esa fecha; y otra con un gravamen inferior entre el 12 y el 31 del mismo mes, de acuerdo con la nueva escala que rige para el conjunto del ejercicio, explica Josep Maria Noguera, portavoz de la Associació Professional de Tènics Tributaris de Catalunya i Balears.

«En realidad, se trata de una regularización como la que se hace cuando el trabajador tiene un hijo o modifica alguna de sus circunstancias personales o familiares», destacan en Hacienda. Y subrayan que la informática facilita los cambios aunque sean a mitad de mes.

Las empresas no piensan lo mismo. Y los expertos no critican que se rebajen impuestos, pero sí la forma en la que se ha hecho, que consideran precipitada y con un carácter esencialmente electoral.