PRIMERA JORNADA DE LA CUMBRE EUROPEA DE PRIMAVERA

La UE promete dar prioridad a la lucha contra el paro sin gastar más

Aspecto de una de las movilizaciones de los sindicatos representativos de toda Europa celebradas ayer en Bruselas, cerca de la Comisión Europea.

Aspecto de una de las movilizaciones de los sindicatos representativos de toda Europa celebradas ayer en Bruselas, cerca de la Comisión Europea.

ELISEO OLIVERAS / JUAN RUIZ SIERRA
BRUSELAS

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Los líderes de la Unión Europea (UE) prometieron ayer dar más prioridad a la lucha contra el paro y a impulsar el crecimiento económico, pero sin gastar más y sin abandonar la actual política de ajustes, reformas y saneamiento presupuestario. La primera jornada de la cumbre europea estuvo centrada en debatir las orientaciones generales de política económica para la UE y sus estados miembros este año y para el próximo.

«Abordar el desempleo es el más importante desafío social al que nos enfrentamos. Por ello, las políticas activas en el ámbito laboral y social requieren prioridad y atención especiales», acordaron anoche los Veintisiete. No obstante, los líderes insistieron en que «debe seguir progresándose en las consecución de unos presupuestos estructuralmente equilibrados». «El saneamiento presupuestario» debe ir acompañado de «reformas estructurales» para mejorar la competitividad y «la corrección de los desequilibrios macroeconómicos», precisa el borrador de conclusiones de la cumbre.

CONTRARRESTAR EL MALESTAR / El énfasis verbal de los líderes sobre el paro y a favor del crecimiento intentan contrarrestar el creciente malestar de la población europea ante la política de austeridad a ultranza impuesta por la Comisión Europea y Alemania, que ha hecho caer de nuevo a la eurozona en la segunda recesión desde la crisis financiera del 2008 y ha disparado el paro hasta récords históricos.

«Existe el riesgo de una revuelta social», advirtió el primer ministro luxemburgués y hasta hace poco presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker. El primer ministro italiano en funciones, Mario Monti, también señaló que los líderes europeos deberían «reflexionar sobre el caso italiano», donde las recientes elecciones han reflejado un voto masivo de castigo contra la política económica de la UE.

La cancillera alemana, Angela Merkel, también insistió en que hay que priorizar la lucha contra el desempleo juvenil, que afecta al 55,5% de los jóvenes españoles. Pero ese énfasis no implica que el sector duro de la UE, encabezado por Alemania, Holanda, Gran Bretaña, Suecia y Finlandia, esté dispuesto a apoyar un mayor gasto público para impulsar la recuperación.

«Hay que reforzar el crecimiento en Europa con medidas que no impliquen gastar dinero extra», advirtió el primer ministro holandés, Mark Rutte. «Es necesario poner las finanzas públicas en orden, de lo contrario se pierde la confianza del mercado, y al mismo tiempo hay que reformar para crear más puestos de trabajo», precisó Rutte. «Las reformas son el mejor estímulo económico», remachó el primer ministro finlandés, Jyrki Katainen.

FRANCIA PIDE FLEXIBILIDAD / El presidente francés, François Hollande, reclamó «más flexibilidad» en la política de ajuste presupuestario para que no se dañe la recuperación. Hollande también insistió en que «no solo hay que fijar un objetivo de crecimiento, sino que también hay que movilizar los medios». Pero el primer ministro sueco, Fredirk Reinfeldt, advirtió de que «hay países que aún necesitan medidas de austeridad porque tienen déficits enormes y, si no los afrontan, los mercados les golpearán duro».

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, presionó para que la UE aprobase políticas de crecimiento. «Europa estuvo el año pasado en recesión mientras en el resto del mundo hubo crecimiento. Hacen falta medidas de crecimiento y resolver los problemas de financiación y del paro juvenil», insistió Rajoy.

Pese a que en privado fuentes del Gobierno se muestran muy críticas con el énfasis de Merkel en la austeridad a ultranza y se quejan de que no tiene suficientemente en cuenta los esfuerzos españoles, Rajoy tuvo buenas palabras para la cancillera «No creo que haya nadie en Europa que se oponga al crecimiento», dijo en una referencia a Merkel. «Son necesarias las políticas de control del déficit, pero hay que apostar por que Europa crezca. Entre otras cosas, porque eso también ayuda a mejorar las recaudaciones y corregir el déficit», destacó Rajoy.