«Buenas, traigo 500.000 euros»

Es una escena habitual estos días en asesorías fiscales y bancos: «Buenas, traigo más de 500.000 euros. Cómo puedo acogerme a laamnistía fiscal». Los despachos echan humo, especialmente esta semana. A medianoche finalizael plazo para acogerse a la amnistía fiscal para todos los ingresos ocultos aHaciendaanteriores al 31 de diciembre del 2010.

«Los problemas surgen cuando se quiere hacer una transferencia desde unbanco en Suiza,Andorrau otro país para pagar el peaje del 10% que hay que liquidar para regularizar las rentas ocultas. Se le exige el impreso D-1 que se remite al Banco de España y que requiere 30 días», explica Josep Maria Noguera, de la Associació Professional de Tècnics Tributaris de Catalunya i Balears.

No es el único problema, porque hay entidades financieras que ponen trabas a la apertura de depósitos voluminosos, que requieren el impreso S-1 para cumplir los protocolos de las normas contra el blanqueo. Lo habitual es explicar que «el dinero procede de actividades comerciales o salarios de los últimos años», afirma Noguera. A veces se lo creen y otras veces, no.

Al inicio del proceso, en primavera, hubo muchas reticencias de los potenciales beneficiarios. Tanto, que los técnicos de Hacienda, agrupados enGestha, estiman que hasta octubre -un mes antes de finalizar el plazo- apenas se recaudó el 6% de los 2.500 millones previstos. Pero, al final, tras aclarar el fisco numerosas dudas sobre la marcha y aprobarse la nueva ley antifraude, muchos potenciales beneficiarios se han despertado.

Esteban Raventós, socio de fiscal del despacho Baker & McKenzie en Barcelona, asegura que «han contribuido muchos factores al impulso de los últimos días. Uno es la norma contra el fraude, que endurece las sanciones por no informar de los activos en el exterior y otra, el borrador de reforma del Código Penal», que eleva de dos a cinco años la pena por delito fiscal agravado, en lugar de uno a cinco. De no cometer delito o de poder acogerse a la prescripción se pasa a la situación contraria.

Carolina Mateo, de Pich Associats, asegura que la mayoría de clientes de esta semana «tratan de aflorar tanto efectivo como títulos o fondos de inversión que superan los 500.000 euros». En todo caso, se busca que asuman «el menor riesgo posible», por lo que se les aconseja la amnistía, «pagar el 10%, aunque resulte superior a una declaración complementaria, pero el riesgo es menor».

Raventós considera que en materia de recaudación, el proceso «no será un fiasco». Lo que no se obtenga con la amnistía se logrará con declaraciones complementarias del 2011, que hay que realizar tras haberse acogido a la regularización especial. En general, el consejo es ladeclaración especial (amnistía) para ingresos de ejercicios no prescritos anteriores al 2010. Para el resto, la complementaria.

Y si se trata de dinero que está oculto en casa, bajo el colchón o bien en una caja fuerte, lo más habitual es que se quede ahí. Ante la duda, riesgos, los mínimos.