AJUSTES BANCARIOS

El Popular definirá tras el verano su ajuste de plantilla y oficinas

El banco prepara un recorte drástico pero niega que será de 3.000 empleos

El presidente del Banco Popular, Ángel Ron, durante la junta de accionistas, en abril de este año.

El presidente del Banco Popular, Ángel Ron, durante la junta de accionistas, en abril de este año.

P. ALLENDESALAZAR / MADRID

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El Banco Popular tiene previsto culminar tras el verano, probablemente en septiembre u octubre, el proceso de análisis del que se desprenderá el drástico recorte de plantilla y oficinas que lleva tiempo anunciando que va a acometer. La entidad está en pleno estudio de las tareas, procesos y actividades que va a cambiar, y de ahí se desprenderá la cifra de ajuste de su estructura.

El grupo ha negado así que tenga la cifra decidida, como publica este jueves 'Expansión'. El medio económico ha asegurado que el banco tiene previsto recortar entre el 16% y el 20% de la plantilla (es decir, entre 2.500 y 3.000 empleos) antes de que acabe el ejercicio, tanto en la red como en los servicios centrales, con un plan de bajas incentivadas y prejubilaciones, así como el cierre de 300 sucursales. 

Fuentes del Popular recuerdan que en la última junta de accionistas celebrada en abril, en el folleto de la reciente ampliación de capital y en las últimas presentaciones de resultados, el banco ha ido anunciando que se encamina a una importante reducción de plantilla para reducir los costes y mejorar la rentabilidad en el marco del proceso de saneamiento en que está inmerso y para adaptarse al cambio que están suponiendo para la banca las nuevas tecnologías, que están disminuyendo de forma notable las visitas y los servicios que se prestan en las oficinas.

NEGOCIACIÓN

En la consecución de ese objetivo se enmarca el análisis que está realizando sobre qué actividades podría realizar con menos personal para reducir costes. Una vez que lo culmine tras el verano, será el momento de decidir en qué plazo (puede hacerse en varias fases para que no afecte al servicio a los clientes) y cómo se instrumenta esa reducción de plantilla (bajas incentivadas, prejubilaciones, etc), que en cualquier caso el grupo asegura que hará de forma pactada con los trabajadores y no traumática. Para ello, abrirá el habitual proceso de negociación con los sindicatos. 

Popular recortó un 23,5% sus oficinas y un 17% su número de empleados entre el 2010 y el 2015. El grupo cerró el primer trimestre del 2016 con 15.020 trabajadores, un 1,8% menos que un año antes, y 2.106 sucursales, un 1,5% menos. En la última junta, su presidente, Ángel Ron, avanzó que el banco seguiría reduciendo sus gastos "en la medida en que así lo aconsejen las condiciones de mercado y los cambios tecnológicos".

CCOO ha asegurado que desde "hace meses" pide al banco que le explique sus planes y que la entidad le contesta que no tiene tomada "ninguna decisión". La central le ha reclamado que lo negocie con los sindicatos porque ""sólo así se puede acometer con garantías reales para la plantilla una situación de esta complejidad".