El Popular agrava sus problemas con otra caída del 18% en bolsa

La espiral negativa en que lleva inmerso el Popular desde hace tiempo, y particularmente desde el martes pasado, ha hundido aún más al banco este lunes. Tras despeñarse un 38% la semana pasada, las acciones de la entidad se han desplomado en su séptima sesión seguida en rojo otro 18,16%, su mayor caída en el 2017, hasta un nuevo mínimo histórico de 0,338 euros. El banco vale en bolsa apenas 1.418 millones de euros, prácticamente la mitad  que hace una semana (un 48% menos, desde los 2.700 millones), un 63% menos que a principios de año (3.800 millones) y un 99% menos que antes de la crisis.

La falta de claridad sobre su futuro ha dado pie a todo tipo de rumores que le están llevando a una situación límite. “Es un banco solvente y viable, pero si pierde la confianza de los inversores y los depositantes, como está sucediendo, puede dejar de serlo. Ha habido un problema de gestión de la comunicación más que del balance”, lamentan fuentes del sector.

Distintos representantes bancarios apuntan que su presidente, Emilio Saracho, se equivocó al dejar abierto en febrero la posibilidad de vender el banco o ampliar capital, en lugar de anunciar una de las dos opciones una vez decidida. También erró, a su juicio, el consejero delegado, Ignacio Sánchez-Asiaín, al dar a entender en abril que la cuantificación del problema inmobiliario y el déficit de provisiones del banco se desvelaría “en pocas semanas”, para luego retrasarla “hacia el verano”.

ESTABILIZAR EL BANCO

En el sector se defiende que es necesario “estabilizar” al banco, con medidas como una línea de liquidez del Banco Central Europeo (BCE) para tranquilizar al mercado ante la probable salida de depósitos. Precisamente, Saracho y Sánchez-Asiaín tienen este martes una reunión ordinaria con responsables de la supervisión bancaria del banco central. No se descarta que sobre la mesa esté la posibilidad de concederle alguna línea de crédito, pese a que la entidad cumple los requisitos de liquidez y capital, o, según algunas fuentes, que funcionarios europeos colaboren en la elaboración de su estrategia.

Paralelamente, la entidad sigue perdiendo inversores. Credit Mutuel, socio del banco desde el 2010 y accionista de referencia, ha anunciado este lunes que deja su puesto en su consejo, después de comprarle la semana pasada el 48,98% de su firma conjunta TargoBank. La entidad francesa posee el 4,061% de las acciones del Popular y, según fuentes del mercado, podría estar vendiéndolas, como ya hizo el fondo Blackrock la semana pasada (del 4,09% al 1,77%), lo que habría contribuido a su caída en bolsa.

La sombra de una posible intervención pública sobrevuela, ante las dudas sobre el interés del Santander y Bankia de presentar una oferta si no hay ayudas y tras la advertencia lanzada la semana pasada por el europeo Mecanismo Único de Resolución.