NEGOCIACIÓN COLECTIVA

Patronales y sindicatos firman un pacto para impulsar la recuperación en Catalunya

El Acuerdo Interprofesional reaviva la guerra entre Pimec y Foment por la representatividad de las pymes

Representantes de sindicatos y patronales firman el Acuerdo Interprofesional de Catalunya.

Representantes de sindicatos y patronales firman el Acuerdo Interprofesional de Catalunya. / ALBERT BERTRAN

ANTONI FUENTES / BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Los líderes de los sindicatos y las patronales de Catalunya han rubricado hoy las 49 páginas de un pacto con el que pretenden contribuir a acelerar la recuperación de las empresas y de los trabajadores. El Acuerdo Interprofesional de Catalunya (AIC) firmado por CCOO, UGT, Fepime, Pimec y Foment del Treball recomienda subidas salariales que dejen atrás la situación de excepcionalidad de los años más duros de la crisis y mecanismos de flexibilidad interna para aumentar la competitivdad de las compañías. 

El AIC, conocido como el convenio de los convenios, será la guía para los negociadores de convenios colectivos de Catalunya hasta el 2017 y se ha firmado después del pacto alcanzado por las cúpulas del conjunto de España de los sindicatos y las patronales. Pero más allá de su valor como paraguas para la negociación colectiva, los dirigentes sindicales y empresariales confían en su efecto positivo sobre el clima laboral y la paz social, así como en que actúe como una palanca para que la recuperación económica se aprecie con más claridad en la actividad de las empresas y, en consecuencia, también en el bolsillo de los trabajadores.

Para Josep González, presidente de Pimec, "será una buena herramienta para ayudar a salir de la crisis al tiempo que da una señal de confianza y maduez del marco catalan de relaciones laborales". Su homólogo de Foment, Joaquim Gay de Montellà, ha destacado la "relevancia la flexibilidad negociada dentro de las empresas" como un elemento clave de un pacto que "marcará las bases de la negociación colectiva en los próximos años y mejorará la competitividad y las condiciones laborales en Catalunya". 

FLEXIBILIDAD "NEGOCIADA"

Esa flexibilidad de la que dispondrán las empresas no será a cualquier precio, según Joan Carles Gallego, secretario general de CCOO de Catalunya, sino que se aplicará "de forma negociada y no por imposición" como permitiría la reforma laboral. Entre los mecanismos de flexibilidad destacan las bolsas de horas que ya se alican en grandes empresas industriales como Seat y Nissan y que permiten ampliar o reducir la actividad en función de la demanda y evitar así medidas de ajuste traumáticas. Para Gallego, el nuevo acuerdo "ayudará a que la recuperación llegue a los trabajadores recuperando derechos y rompiendo la lógica de la devaluación salarial".

El líder de la UGT catalana, Josep Maria Álvarez, ha indicado que los negociadores del sindicato utilizarán el acuerdo "con entusiasmo" y emplazó al resto de organizaciones firmantes a convertir el AIC en "un elemento clave para firmar convenios" en los que la prioridad debe ser reducir la brecha salarial agrandada durante la crisis.

OPOSICIÓN DE LA ALTERNATIVA SINDICAL

El AIC ha nacido salpicado por la guerra entre Foment del Treball y Pimec en relación con la representatividad de las pymes. González ha anunciado la impugnación como firmante de Fepime al considerar que esta organización, que forma parte de Foment, ha perdido la consideración legal de entidad más representativa necesaria para firmar este acuerdo. La presidenta de Fepime ha rechazado estas acusaciones y ha afirmado que la organización no entrará "en los conflictos que abre Pimec". 

Además, el nuevo AIC cuenta con la oposición de sindicatos con menos peso como CGT, IAC, CSC y COS agrupados en una alternativa sindical. Estas organizaciones consideran que el pacto firmado favorece la precariedad laboral y "aceptan la lógica empresarial" en aspectos como las garantías salariales, la jornada irregular y la flexibilidad.

En cambio, para el conseller en funciones de Empresa i Ocupació, Felip Puig, el AIC es un ejemplo del "buen clima de concertación y diálogo existente en Catalunya" y también cree que "contribuirá a consolidar la recuperación económica y a acelerar la salida de la crisis".