Panasonic compra un 20% más de Ficosa y asume el control

La multinacional japonesa Panasonic tomará el control y la mayoría del capital de la empresa familiar catalana Ficosa. Panasonic ha comprado la participación que tenía la Generalitat, que supone ampliar en un 20% su peso en Ficosa, que llega así hasta el 69%. Con la operación, la Generalitat prevé que obtendrá unas plusvalías aproximadas de 15 millones de euros. En cualquier caso, el 'conseller' de Empresa i Coneixement, Jordi Baiget, ha celebrado este resultado pero ha asegurado que "la operación no se hizo en su día para tener plusvalías sino para ayudar a la empresa".

Hasta ahora, Panasonic ostentaba el 49% del capital del proveedor del automóvil Ficosa. La operación anunciada hoy supone la compra de las acciones de la Generalitat, que asumió a través de un crédito participativo de 60 millones de euros (entre capital e intereses) que concedió al inicio de la crisis para evitar la asfixia financiera de la firma catalana. Ficosa asegura que devolverá a la Generalitat los 50 millones desembolsados en el 2009 más un rendimiento del 29%. 

CONTROL DEL CONSEJO DE ADMINISTRACIÓN

Una vez concluya la compra de ese 20% con la aprobación por parte de las autoridades de competencia europeas, Panasonic tendrá el 69% de las acciones de Ficosa. El 31% restante seguirá en manos de la familia Pujol, una de las cofundadoras de Ficosa, mediante la sociedad Ficosa Inversión. Esta operación ya estaba prevista en el acuerdo que supuso la entrada de Panasonic en Ficosa con la compra del 49% por 100 millones de euros. 

La toma de control de Panasonic se plasmará en un consejo de administración en el que los japoneses tendrán siete representantes frente a cuatro de la familia Pujol. Con la ampliación del capital en manos de la multinacional japonesa, la fábrica de Viladecavalls se convertirá en el estandarte de una nueva división de sistemas para automoción encabezada por Ficosa.

Sin embargo, la gestión de la compañía seguirá en manos del actual equipo de Ficosa encabezado por Xavier Pujol, hijo del cofundador Josep Maria Pujol, como consejero delegado.

COCHES CONECTADOS Y AUTÓNOMOS

Con la puesta en marcha de la segunda fase de la entrada de Panasonic en Ficosa, la multinacional japonesa busca nuevas sinergias que le permitan acelerar el desarrollo de sistemas para el coche conectado, según explica Yoshio Ito, director general de Panasonic, en un comunicado. Xavier Pujol ha indicado que la operación aporta a Ficosa los recursos necesarios para llevar a cabo las "grandes inversiones" que requiere la transición del sector del automóvil. "El apoyo de Panasonic es clave para acelerar las sinergias entre ambas compañías, consolidar nuestro proyecto industrial y tener suficiente masa crítica para liderar la transición del mercado del automóvil", indica Pujol.

La simbiosis entre Panasonic y Ficosa ha permitido lanzar hasta ahora un retrovisor electrónico que funciona con cámaras y que sustituirá a los espejos tradicionales que todavía suponen el grueso de las ventas de la firma catalana. Además, el tándem japonés y catalán ha acelerado el desarrollo de módulos de conectividad imprescindibles para el coche conectado y autónomo. La división creada hace unos años para esos nuevos sistemas cuenta ya con unos 200 empleados, según explicó la firma en el Mobile World Congress de Barcelona.

El apoyo de la Generalitat permitió a Ficosa tomar impulso para superar el bache que sufrió la industria automovilística y afrontar la compra de la antigua fábrica de televisores de Sony en Viladecavalls por un precio simbólico a cambio de asumir unos 550 empleados. Las tensiones creadas durante la crisis y con la absorción de Viladecavalls llevó a la familia Tarragó, cofundadora de Ficosa, a distanciarse de los Pujol y a venderles su participación. 

Ficosa alcanzó una facturación de 1.112 millones en el 2015, lo que supone haber doblado los 550 millones de sus ventas en el 2009, y cuenta con una plantilla de 10.280 trabajadores distribuidos en fábricas y oficinas en 16 países.

La noticia ha sido bien recibida por los sindicatos. CCOO ha valorado positivamente la operación de compra, porque considera que supondrá una mayor estabilidad y garantías de futuro para la plantilla de Viladecavalls. Según el sindicato, el mayor peso de Panasonic posibilitará una mayor capacidad de inversión e innovación y genera expectativas de continuar creciendo en el desarrollo industrial tecnológico de la empresa.