Más que compras

El principal reclamo son los precios bajos en primeras marcas de moda, pero los clientes que se acercan al Rec.0 de Igualada siempre esperan mucho más que una rebaja en la etiqueta. Esperan disfrutar de un día de fiesta, pasárselo bien comprando, lo que los expertos llaman tener una buena experiencia de compra. Y la puesta en escena tiene mucho que ver en ello. Más de 35 antiguas fábricas del barrio del Rec de Igualada se convertirán entre el miércoles y el sábado próximos en tiendas de ropa, efímeros espacios de venta en lugares no habituales. Algunas decoraciones son tan laboriosas que empezaron su montaje la semana pasada.

Las pop up stores, o tiendas efímeras, han pasado a ocupar un papel relevante en la estrategia de márketing de las firmas de moda. Son una manera de vender lo máximo posible en poco tiempo, pero también de reforzar la imagen de marca. "Las compañías no vienen solo a quitarse el estoc, algunas lo conciben como un espectáculo, y para las emergentes es una manera de darse a conocer", afirma Marina Iglesias, organizadora del Rec.0.

La experiencia comenzó en el 2009 con 11 marcas y 8.000 visitantes, y ha ido creciendo hasta llegar a la 12ª edición (se celebran en primavera y otoño) con más de 70 marcas (Desigual, Mango, Levi's, Pepe Jeans y Versace Jeans, entre otras) y diseñadores independientes (Miriam Ponsa, Josep Abril, Txell Miras, Veneno en la Piel etcétera).

La tienda de Desigual es una de las que más tráfico atrae. "Generamos espacios cuya motivación va más allá del mero consumo, queremos ofrecer una experiencia memorable", explica David Meyer, responsable de proyectos especiales de Desigual, y hermano del fundador, Thomas Meyer. El factor sorpresa es clave, por eso evita dar detalles sobre qué encontrará el visitante. "Habrá buen sonido, y el propio espacio y sus accesos serán un espectáculo", es lo único que avanza David Meyer. Iniciativas como esta sirven para "reforzar la marca en su ámbito más social", añade.

Mango es otra de las grandes firmas del Rec.0. "Una pop up store tiene que llamar la atención, que te impacte tanto por la decoración como por el producto", explica Belén Par, del departamento de Interiorismo de Mango. El objetivo es que el cliente diga «¡qué pasada!», añade. Para este año, su espacio evocará "una explosión de mariposas", según la interiorista. Mango ha abierto pop up stores en otras ciudades, como Madrid, Barcelona y Girona, pero la de Igualada es la más importante para ellos. No hay una pop up store igual a otra, aunque el material se reutiliza.

Para imprimir más carácter festivo a la cita, los organizadores del Rec.0 han preparado una programación musical con más de 20 formaciones y, por primera vez, una concentración de 25 furgonetas de venta ambulante de comida.