Mango reestrena el cine

El histórico cine Alexandra de Barcelona volverá a abrir dentro de unos meses. Pero en sus salas no se proyectarán películas, sino que se exhibirán las últimas colecciones de ropa de Mango. La cadena catalana de moda invertirá 1,8 millones en convertir el local que ocupaba el viejo cine en su tienda más grande de la capital catalana. La empresa presidida por Isak Andic se ha hecho cargo del espacio que dejó libre el cine Alexandra cuando cerró el 19 de diciembre del 2013 por el descenso de espectadores.

Desde que el propietario del cine, Ramon Colom, bajó la persiana con la proyección de la misma película que inauguró la sala en 1948 (Niñera moderna, de Walter Lang), el amplio local se convirtió en un apetitoso espacio para muchas marcas de ropa en un momento en el que las enseñas que ya están instaladas en Barcelona y otras que quieren entrar en la ciudad buscan los mejores emplazamientos.

La nueva tienda será la número 25 de Mango en Barcelona y contará con una superficie de 1.500 metros cuadrados. Cuando abra, en el primer trimestre del 2015, se convertirá en la más grande de la ciudad al superar por únicamente 13 metros cuadrados los 1.487 de la que tiene la marca en el número 36 de paseo de Gràcia, la antigua sede del Banc Sabadell.

El nuevo local, situado en el número 90 de la rambla de Catalunya, pasa a manos de Mango mediante un contrato de alquiler del que la firma no explicó ni el importe ni el plazo. La cadena combina así en su red de establecimientos los locales en alquiler con los que tiene en propiedad, según indicaron fuentes de la compañía catalana.

La nueva apuesta por ampliar la presencia en el centro de Barcelona responde a la estrategia de la compañía de crecer en establecimientos de gran formato (megastores), con una superficie entre 800 y 3.000 metros cuadrados. Entre sus últimas aperturas destaca la de una tienda en Fráncfort de 3.392 metros que se ha convertido en la más grande de Europa.

La previsión del grupo para este año es dar un salto cuantitativo en su expansión al pasar de 50.000 metros cuadrados de superficie comercial incorporados en el 2013 a 123.000 planificados para este ejercicio, con lo que espera llegar a un total de 723.000 metros. La marca centra esa expansión en Europa, que continúa como «mercado principal» del grupo.

Estas aperturas de establecimientos comerciales son una parte importante de los 300 millones que prevé invertir este año la compañía, que también seguirá ampliando su capacidad logística en Lliçà d'Amunt y su sede central en Palau-solità i Plegamans.