EL CORTE INGLÉS

Las tarjetas regalo ganan terreno

Cada vez más empresas optan por dar bonos de compra a sus empleados como alternativa a la cesta

Cestas navideñas, en el Corte Inglés de la plaza de Catalunya de Barcelona.

Cestas navideñas, en el Corte Inglés de la plaza de Catalunya de Barcelona.

SONIA GUTIÉRREZ / BARCELONA

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Cada Navidad, El Corte Inglés dedica un amplio espacio en sus grandes almacenes para exhibir su gama de lotes y cestas para regalar. Su catálogo incluye desde sencillas cajas por menos de 20 euros a un baúl que cuesta 1.490 euros, con 52 productos (incluidos un jamón ibérico de bellota 5 Jotas, tres botellas de Moët & Chandon y un set de cuchillos y afilador). De estas últimas este año han vendido algunas, pero pocas, explican fuentes del grupo.

Además de los productos tradicionales (bebidas alcohólicas, embutidos, conservas y dulces), en los últimos años se están introduciendo en las cestas otros productos de moda, como botellas de aceite o paquetes para preparar gintónics (con todos los utensilios y especias necesarios). En Catalunya también están teniendo muy buena aceptación los lotes de productos de origen catalán.

El Corte Inglés es uno de los principales distribuidores de lotes navideños en España, y ha notado cómo la crisis ha hecho disminuir la demanda en los últimos años, sobre todo debido al cierre de pymes. Pero desde hace meses, el grupo constata que el consumo está despertando en el país, y calculan que esta será la mejor campaña navideña de los últimos seis años, en ventas. «La tendencia al alza es general, y los lotes no serán ajenos a este repunte», recalcan las mismas fuentes.

No obstante, en los últimos años se está produciendo un fenómeno de sustitución de los lotes navideños por las tarjetas regalo, que el obsequiante carga previamente con cierta cantidad de dinero para que quien la reciba se lo gaste en compras. Se da la circunstancia de que estas tarjetas no estaban pensadas para las empresas, sino como regalo entre particulares, ni tampoco son exclusivamente navideñas, ya que están disponibles durante todo el año. Pero debido a su comodidad, se han abierto paso en estas fechas. «Los lotes incluyen productos que no siempre gustan, mientras que con la tarjeta seguro que se acierta», resumen desde El Corte Inglés.

El resultado es que, mientras que hace décadas las empresas que hacían obsequios a sus empleados o clientes solo se planteaban enviarles lotes o cestas, ahora se avanza hacia un «equilibrio del 50%-50%», añaden, es decir la mitad de compañías que sigan con la tradición seguirán con el lote, y la otra mitad elegirá la alternativa de la tarjeta regalo.

Paradójicamente, El Corte Inglés también constata otra tendencia en el que, a diferencia del caso anterior, es el cliente particular el que se adentra en terrenos típicamente empresariales: cada vez más personas acuden a sus centros a comprar lotes de Navidad para familiares, personal doméstico o profesionales de confianza, como el dentista o el médico de familia.