El inversor catarí impulsará el salto de El Corte Inglés a otros países

Superada la caída del consumo –la crisis y el paro se llevó por delante buena parte de los presupuestos familiares en estos años–, toca pensar en el futuro. Y el del grupo El Corte Inglés pasa por la apertura de centros en el exterior, uno de los focos en los que el presidente del grupo, Dimas Gimeno –que relevó a en el cargo a su tío, el fallecido Isidoro Álvarez–, volcará mayores esfuerzos. La internacionalización vendrá facilitada en buena parte por la entrada en el capital del jeque catarí Hamad Bin Jassim Jaber Al Thani, que ha adquirido el 10% del grupo. Y todo ello, tras superar el bache del consumo y volver al incremento de la facturación: la compañía logró unas ventas de 14.592 millones de euros en el 2014, el 2,6% más.

Los resultados han sido presentados en la junta general de accionistas de El Corte Inglés celebrada en Madrid, reunión en la que se ratificó la entrada del jaque en el accionariado y el cambio de los estatutos para que este pueda ocupar un puesto en el consejo. Una operación a la que se había opuesto frontalmente Carlota Areces Galán, representante de la sociedad Corporación Ceslar, propietaria del 9% del grupo. Ayer, la junta de El Corte Inglés decidió su expulsión como consejera en una decisión no incluida en el orden del día y apoyada por el resto de accionistas presentes en la junta. Corporación Ceslar confirmó ayer que impugnará la junta por vía judicial y pedirá su inmediata incorporación en el consejo del grupo.

La entrada del jeque en el accionariado (a través de un préstamo de 1.000 millones de euros convertible en acciones a tres años por el que recibirá un 10% del grupo, además de un cupón del 5,25% anual pagadero en títulos, que quedarán al inversor un 2,25% adicional del grupo al finalizar el periodo) no solo supone una importante inyección de capital en la firma –que se destinará íntegramente a reducir la deuda y que reducirán los costes financieros–, sino también la apertura de mercados y contactos, aseguraron fuentes del grupo. Es por ello que, tras recuperar la senda del crecimiento en España, la firma está ya embarcada en un plan de expansión internacional que marcará los pasos de la firma durante los próximos años.

PAPEL ACTIVO

Este plan, que estará acabado durante los próximos 12 meses, definirá los mercados objetivos (Latinoamérica siempre ha sido la zona natural de expansión) y la manera de expandirse (apertura de centros o compra de cadenas). En este proceso, según apuntaron las mismas fuentes, el jeque –sus sociedades– podrían tener un papel "muy activo", agregaron.

Pero los planes de Gimeno no solo son la salida al exterior, sino también convertir el grupo en un verdadero actor omnicanal (en todos los formatos, físico y 'on line'), porque los consumidores ya no solo compran físicamente en los centros, sino también 'on line'. De hecho, muchas veces prueban los objetos en el centro y luego terminan las compras en internet; o viceversa, ven un producto en la web y van al centro físico.

"Nuestra ambición es muy clara: contar con el mejor catálogo de venta en internet de cualquier gran almacén del mundo, porque el espacio digital se ha convertido en pieza fundamental de la distribución", aseguró ayer el presidente del grupo en su discurso ante la junta de accionistas, que aprobó las cuentas del ejercicio 2014. "Aspiramos a que nuestros clientes (...) lleven El Corte Inglés en su bolsillo, lo tengan en sus casas a través del ordenador o del televisor y accedan a nuestros productos como si estuvieran en las tiendas físicas", agregó el directivo.

Otras de las actuaciones que se acometerán durante este ejercicio serán continuar trabajando en el plan de ahorro, mejorar la política de compras y de personal, y mejorar la satisfacción y experiencia de los clientes: "Pondremos en marcha un ambicioso programa de personalización orientado a adecuar más y mejor nuestra oferta y servicios a sus preferencias", afirmó Gimeno.

CUENTAS DEL 2014

 Los planes del grupo van enfocados a continuar con la línea iniciada en el ejercicio 2014, el primero desde el 2010 en el que la firma ha logrado aumentar la facturación: +2,6%, hasta los 14.592,03 millones de euros. El grupo también aumentó el beneficio bruto de explotación (ebitda) hasta los 826,39 millones de euros (el 14,6% más), pero el beneficio neto cayó hasta los 118,08 millones (-32%) debido a la ausencia de extraordinarios –el ejercicio precedente incluyó la venta de la financiera El Corte Inglés– y los mayores costes financieros.

Por líneas de negocio, los grandes almacenes El Corte Inglés facturaron un 3,6% más, hasta los 8.768,19 millones de euros, aunque el beneficio descendió un 32,2% hasta los 186,29 millones de euros. Mientras, Hipercord facturó 1.570 millones (-8,5%), con unas ganancias de 5,28 millones (-27,5% por la reorganización de formatos) y Viajes El Corte Inglés logró aumentar las ventas hasta los 2.350,12 millones de euros (+4,5%), con 37,42 millones de euros de beneficio (+7,7%).

Del resto de divisiones, destacó la de informática, con un aumento de las ventas hasta los 737,1 millones de euros (+11,6%) y del beneficio hasta los 24,18 millones (+18,1%). También Sfera incrementó las ventas hasta los 205,14 millones (+25%) y el beneficio (24,35 millones, el 10% más).

Según el grupo, la plantilla de la cadena se mantuvo estable en 91,437 empleados (no se integran las empresas participadas), y la web de El Corte Inglés recibió 227 millones de visitas (+46,7%). Por los centros pasaron 600 millones de visitantes, 10 millones más. La aportación del grupo a la actividad económica de España fue de 16.100 millones, según la firma.