ESTRATEGIAS FINANCIERAS

Hasta debajo de las piedras

La banca busca vías para cobrar más comisiones, en ocasiones cargándolas en servicios que antes eran gratis El Banco de España le insta a explorar fórmulas para mejorar los ingresos

Comisiones 8Una cliente de bancaria utiliza su tarjeta en un cajero automático en una oficina de Barcelona.

Comisiones 8Una cliente de bancaria utiliza su tarjeta en un cajero automático en una oficina de Barcelona.

PABLO ALLENDESALAZAR / MADRID

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Toda conversación con un banquero este año tiene un elemento común: su obsesión por mejorar la rentabilidad de sus entidades. Lo peor de la crisis ha pasado para el sector, con la morosidad a la baja y con ella las provisiones para protegerse de las pérdidas por impagos. Sin embargo, sus cuentas se ven lastradas por los bajos tipos de interés con que el Banco Central Europeo (BCE) está tratando de reactivar la economía europea: pagan menos por los depósitos, pero también cobran menos por el crédito.

La bajada de la remuneración del pasivo tiene un tope ya que, aunque algunas entidades admiten habérselo planteado teóricamente, ninguna se atreve a cobrar por guardar el dinero, como ha logrado hacer el Tesoro con la deuda de plazos más cortos. En cambio, el crédito sigue abaratándose, con lo que el margen por cliente -la base más recurrente de los ingresos—está menguando hasta niveles peligrosos para su viabilidad.

«Los particulares no son rentables», resume un ejecutivo financiero. «Hay entidades con el margen de explotación negativo si le quitas el resultado de operaciones financieras (venta de carteas de deuda pública, sobre todo) y el cobro de dividendos», abunda otro.

Las entidades, así, se han puesto a buscar hasta debajo de las piedras de su balance vías para mejorar sus ingresos por comisiones, en algunos casos cargándolas sobre servicios que antes eran gratis. Una muestra es la decisión de CaixaBank y BBVA de cobrar dos euros a los no clientes que usen sus cajeros, paso que estudia seguir el resto del sector.

Recado del Banco de España

Los bancos lo están haciendo por sí mismos, pero por si acaso el Banco de España les ha dejado un recadito. «Procede una reflexión sobre si la banca comercial puede seguir basando el grueso de la generación de ingresos en la brecha entre la remuneración del activo y la del pasivo. En el contexto actual, parece razonable esperar una mayor generación de valor en la prestación de servicios transaccionales o de gestión que pueda ser directamente retribuida con las comisiones correspondientes», les advirtió hace días el subgobernador, Fernando Restoy.

El problema es la baja rentabilidad media sobre el capital, que no alcanzó el 3% el año pasado en la zona euro. La del sector español fue mejor, del 6,5%, pero en buena medida apoyada en operaciones financieras no recurrentes. «Dado que el coste del capital podría situarse en el entorno del 10%, es evidente que la rentabilidad del negocio debe mejorar para asegurar su capacidad para atraer los fondos que requiere la expansión de la actividad crediticia y los nuevos requerimientos regulatorios», advirtió Restoy.

La presión del mercado es palpable. «El sector bancario comienza la publicación de resultados con grandes expectativas, esperando un 40% más de beneficios. El test trimestral frente a los inversores podrá pasar factura a distintas entidades si no son capaces de mostrar solidez en el balance y alternativas creíbles al margen de intereses, que seguirá siendo un quebradero de cabeza por los bajos intereses en los que se mueve la zona euro», apunta Javier Urones, analista de XTB.