El Govern regulará los nuevos tipos de alojamientos turísticos

El Govern modificará la normativa turística para adaptarla a tipos de alojamientos que se han extendido con las nuevas tecnologías, y que no están regulados. El conseller de Empresa y Ocupació, Felip Puig, afirmó ayer que «no se puede cortar el paso» al consumo colaborativo -del que son ejemplos las empresas Airbnb, de alquiler de viviendas, y Uber, de transporte de pasajeros-, pero sí exigir el cumplimiento de unas normas. Por ello, el Govern revisará el decreto de alojamientos turísticos para «dar respuesta a las nuevas modalidades de alojamientos», dijo Puig en un acto para conmemorar el Día Internacional del Turismo.

El conseller explicó que hay algunas modalidades que están reguladas en otros países europeos desde hace tiempo, pero no en España ni Catalunya, y que en el próximo año esa será una de las líneas de actuación de su departamento.

'BED AND BREAKFAST' / El alquiler de habitaciones sueltas es una de las modalidades no reguladas más extendidas en Catalunya, ya que el decreto vigente, del 2012, solo contempla el alquiler de pisos enteros. «Quizá deberíamos regular el bed and breakfast», afirmó el conseller al hablar sobre el mismo asunto, horas después, durante el pleno del Parlament. Sobre Airbnb, multada por la Generalitat, afirmó que la empresa está dispuesta a dialogar con el Govern, a lo que Puig destacó:  «Es muy fácil, toda la oferta tiene que llevar la matrícula de registro acreditado».

El objetivo de ampliar el decreto turístico a nuevas modalidades de alojamientos es proteger al cliente y «enriquecer la oferta» asegurando la calidad y sin que suponga competencia desleal con otros empresarios, afirmó el conseller. «La economía colaborativa ha venido para quedarse -dijo Puig en su discurso ante representantes de la industria-. Bienvenida sea, nos hemos de adaptar, pero se le ha de exigir a sus operadores que cumplan como el resto». El Govern se centrará en las actividades que tengan ánimo de lucro, y no en el simple trueque entre particulares. A los que sí hagan negocio, se les impondrán normas de sanidad, seguridad y las obligaciones fiscales correspondientes.

INCIVISMO / El conseller también se refirió al incivismo, que calificó como una de las «amenazas» del sector y que será «objetivo prioritario» del Govern combatirlo. «No queremos un turismo cualquiera», aseguró Puig, que añadió que hay que conciliar el éxito turístico con los derechos de los autóctonos.

Puig remarcó que el incivismo es «una parte muy minoritaria» del turismo de Catalunya, y que no solo a afecta a apartamentos ilegales, sino también a los que están registrados, así como al resto de establecimientos, como  hoteles (con el fenómeno del balconing) y cámpings.