El Govern opta por regular la puesta en marcha del impuesto a los depósitos bancarios

El Ejecutivo catalán y el Estado mantienen un conflicto en el Constitucional por el nuevo gravamen

FIDEL MASREAL / BARCELONA

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La Generalitat ha optado por poner en marcha la maquinaria legal para cobrar el impuesto sobre los depósitos a los bancos que operan en Catalunya. El Ejecutivo catalán mantiene abierto un conflicto por este impuesto con el Gobierno ante el Tribunal Constitucional y con su decisión se avanza al Estado en su intento de cobrarlo.

En su reunión de hoy, el Govern ha aprobado el reglamento del impuesto catalán sobre los depósitos, que obliga a la banca a autoliquidar entre el 1 y el 20 de octubre el importe de este impuesto correspondiente al 2013 ante la Agencia Tributaria de Catalunya.

La directora general de Tributos de la Generalitat, Elsa Artadi, ha explicado a Efe que como la ley catalana que crea este impuesto está en vigor, "los bancos deben presentar la autoliquidación del impuesto, porque si no lo hacen se les debería sancionar", aunque ha dado por supuesto que la banca atenderá este requerimiento.

Sin embargo, ha admitido que la situación resulta un poco "caótica" porque la Generalitat y el Estado han creado un impuesto sobre el mismo hecho imponible, los depósitos bancarios, y ha añadido que el conflicto no se resolverá hasta que el Tribunal Constitucional se pronuncie sobre los recursos cruzados entre ambas administraciones.

El impuesto de depósitos puede suponer una gran fuente de ingresos para las arcas de la Generalitat; en un principio, se estimó su impacto anual en unos 500 millones de euros, y luego se elevó la previsión de recaudación hasta los 670 millones, aproximadamente.