afectados por la medida inesperada

"Fui al médico por estrés y tomo antidepresivos"

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Por cinco días, le cambió la vida. Cinco días después de que la Seguridad Social emitiera la polémica circular, José Emilio cumplió los 61 años y ya no pudo cumplir sus planes de jubilarse anticipadamente tras más de 35 años cotizados como trabajador en una entidad bancaria en la que llegó a director de sucursal. «De sueldos altos, nada. Me despidieron en febrero del 2009; cobré el paro durante dos años y en la misma Seguridad Social me recomendaron suscribir el convenio especial», explica desde Gandía.

Durante 40 meses pagó de su bolsillo para mejorar su futura pensión «y ni siquiera es la cotización máxima, porque no la admiten». Cree que «hay que seguir cotizando, aunque me lo estoy planteando». Tiene que volver a echar cuentas pero sabe de otros afectados que no podrán tirar de ahorros para cubrir hasta que cumplan los 63 años. «No me veo con edad de pleitear, tuve un fuerte estrés, fui al médico y me recetó antidepresivos».

José Emilio es comprensivo con Fátima Báñez y Tomás Burgos y ve la mano de los técnicos «que rebañan dinero porque no hay cotizaciones. No hay más que ver el tipo de contratos que se hacen ahora». «Este as que se han sacado de la manga deberían haber evaluado el daño que ha hecho», concluye.