Aeropuertos

Fomento deja a la Generalitat fuera de El Prat privatizado

JUAN RUIZ SIERRA
MADRID

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Dentro de muy poco tiempo (un año y medio, según deseo del Gobierno), la gestión de los aeropuertos de El Prat y Barajas será privada. Solo privada. Sin participación, salvo cambios, de la Generalitat, los ayuntamientos de Barcelona y El Prat y la Cámara de Comercio de la capital catalana, al contrario de lo que anunció el ministro de Fomento, José Blanco, el pasado enero. El golpe de efecto que dio ayer el Ejecutivo incluye un nuevo modelo en el que las dos principales instalaciones aéreas de España, y puede que también otras si despiertan interés, funcionarán, tras un concurso público, por el régimen de concesión.

El marco ahora establecido podría interpretarse como un agravio a las administraciones territoriales. Fuentes de Fomento, sin embargo, argumentaron que el papel de la Generalitat o los consistorios tenía sentido cuando el modelo de gestión era público para así evitar «presuntos agravios comparativos», pero ahora que es privado, y que ambos aeropuertos serán gobernados por concesionarios, «ya no tiene sentido decir que el Estado favorece a Barajas respecto a El Prat o al contrario».

Antes de las concesiones, en cualquier caso, habrá que dar otro paso para ganar en «competitividad», que es lo que el Gobierno pretende con estas medidas: se creará la sociedad estatal AENA Aeropuertos SA, en la que podrá entrar capital privado hasta el 49% y no hasta el 30%, como se anunció en un principio.

La vía para el ingreso de inversores será bien por venta directa, bien a través de su salida a bolsa, bien por ambas fórmulas. Según fuentes del departamento de Blanco, con esta iniciativa el Estado podría ingresar 9.000 millones de euros. Sus cuentas son estas: AENA, sostienen, vale en torno a 30.000 millones de euros, pero su deuda asciende a los 12.000 millones. Si a la primera cantidad se le resta la segunda, se obtienen 18.000 millones. El 49% de esta cifra rondaría los 9.000 millones. «Es una estimación -insistieron en el departamento-. El mercado decidirá».

La nueva AENA, a su vez, podrá dividirse en sociedades filiales dedicadas a determinados aeropuertos. Habrá otros, los más pequeños, que gestionará de forma directa, como hasta ahora. Y luego estarán El Prat y Barajas, bajo concesión. El Gobierno pretende que todo el proceso culmine antes de que se acabe la legislatura, si bien fuentes de AENA dijeron que será «difícil» que las dos instalaciones aéreas se rijan por el nuevo régimen antes de las generales.

LAS AUTONOMÍAS / ¿Qué papel tienen las autonomías? Escaso. Según Fomento, se crearán comités de coordinación aeroportuaria entre el Estado y las comunidades, unos órganos encargados de coordinar competencias en materia de servidumbres acústicas, políticas urbanísticas, territoriales y medioambientales, así como crear comités de desarrollo de rutas aéreas y garantizar las conexiones con los aeropuertos.