REUNIÓN MINISTERIAL CLAVE EN BRUSELAS

España queda excluida del BCE y no logra ningún cargo económico

ELISEO OLIVERAS / Bruselas

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Españaha sufrido como se temía en la reunión del Eurogrupo una derrota total en el reparto de los cargos económicos pendientes de la eurozona, quedandoexcluida por la primera vez de la cúpula delBanco Central Europeo (BCE) y ni siquiera ha conseguido un cargo de consolación como la dirección del Mecanismo Europeo de Estabilidad.

El Eurogrupo ha acordado nombrar al presidente delBanco Central de Luxemburgo, Yves Mersch, como nuevo miembro del comité ejecutivo del Banco Central Europeo (BCE), en sustitución del español José Manual González-Páramo, cuyo mandato concluyó a final de mayo. El nombramiento llega con más de tres meses de retraso debido a los pulsos políticos internos de la eurozona. De este modo, España ha quedado excluida de la cúpula del BCE por primera vez desde la creación del euro.

Debilidad política y económica

A pesar de se uno de los cuatro grandes, la debilidad política y económica del Gobierno ha pasado factura, y el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha tenido que aceptar que el representante de la autoridad monetaria de un país de tan sólo 400.000 habitantes le desaloje de la cúpula del BCE.

El Gobierno tampoco ha logrado el cargo de consolación de la dirección del futuro Mecanismo Europeo de Estabilidad para el que había propuesto a Belén Romana, la antigua directora general del Tesoro de la época del último Gobierno de José María Aznar. El puesto a que esperaba conseguir España será ocupado por el alemán Klaus Regling, que ya dirige en la actualidad el fondo de rescate temporal, denominado Fondo Europeo de Estabilidad Financiera.

El Eurogrupo también ha acordado renovar el mandato de su presidente, el primer ministro luxemburgués, Jean-Claude Juncker, por otros 2,5 años, aunque en la práctica se tratará de una prórroga del mandato por unos seis meses hasta que exista un consenso entre los miembros de la eurozona para el nombramiento de un sucesor. Juncker ha anunciado que piensa dimitir a finales de año o a principios del 2013, una vez haya un acuerdo sobre su sucesor. La propuesta de Alemania de que el cargo sea asumido por su ministro de Finanzas, Wolgang Schäuble, pero ha tropezado con las reticencias de varios países encabezados por Francia.