España escala en Clarks

Clarks, la mayor compañía de calzado del Reino Unido y cuarta del mundo, confiará a España la gestión de todo el sur de Europa. De hecho, desde la sede de Madrid ya hay la dirección de márketing para el sur de Europa y el departamento financiero y la idea es que «en un par de años se lleve toda la operativa», explicó ayer el director general de Clarks en España, José María Belda, en una entrevista en Barcelona. «Hemos reforzado nuestra estructura y la hemos planteado para poder dirigir desde España el sur de Europa», afirmó Belda.

Belda es el fundador de la empresa que distribuye en exclusiva la marca Clarks en España. No es una filial, sino una compañía aparte que trabaja para la firma británica C & J Clark Ltd, grupo familiar. Ambas se complementan bien, aseguraron tanto Belda como el director del sur de Europa, Tom Boyd. Belda no descarta que dentro de varios años la empresa española acabe formando parte de la británica, aunque eso es algo que habría que negociar, remarca. De momento, seguirán trabajando en «comunión», como hasta ahora. El resto de países del sur de Europa donde está presente la marca de zapatos, como Grecia e Italia, mantendrán las oficinas de ventas, pero en lugar de reportar a la central lo harán a Madrid.

España representa en torno al 17% de las ventas de Clarks en Europa, sin contar su país de origen, el Reino Unido, que junto con Norteamérica y Alemania, son los principales mercados de la marca. En total, la compañía cerró el ejercicio del 2013 con una facturación global de 1.540 millones de euros, el 5,5% más. Boyd prevé que este año también registrará crecimientos de un dígito. La compañía inició hace cinco años una nueva estrategia, intensificando la imagen de moda, y evitar encasillarse solo en la idea de calzado cómodo. Ahora, la marca está rediseñando las tiendas para reforzar este concepto. Una de las remodeladas es la de la calle de Diputació de Barcelona, que se reestrenó ayer. «Estamos invirtiendo más que nunca», dijo el director de Clarks para el Sur de Europa.

En España, las ventas fueron de unos 34 millones de euros en el 2013, según Belda. Aunque la crisis no impidió que la firma siguiera creciendo a nivel mundial, en el mercado español sí se notó la recesión. «Este año por fin estamos en crecimiento», dijo Belda, que prevé que se venderán el 7,5% más de pares de zapatos este año, y el 18% más en el 2015 (unos 730.000 pares). La firma se expande en España mediante franquicias (tiene medio centenar), y el objetivo es sumar dos o tres más por año, principalmente en Barcelona, Madrid y ciudades como Bilbao y Valencia.