opciones para conseguir más recursos en tiempos de crisis

España busca fórmulas para gravar a los ricos

AGUSTÍ SALA / BARCELONA
PILAR SANTOS / MADRID

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españa busca fórmulas para gravar a los ricos, para obtener más recaudación en tiempos de crisis y reducir el déficit público. Después de que multimillonarios de EEUU, Francia o Alemania hayan reclamado a sus gobiernos contribuir más, el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero deshoja aún la margarita.

Y, tras varias idas y venidas a propósito de la necesidad de desempolvar o no el impuesto de patrimonio se ha abierto un intenso debate en la Moncloa. Es un tributo cedido con el que las autonomías recaudaban unos 2.000 millones de euros hasta el 2008, el ejercicio en el que el Ejecutivo socialista decidió que dejara de presentarse; 10 veces más que lo que ingresarán Francia e Italia con los nuevos gravámenes a las fortunas que han anunciado.

En el Consejo de Ministros de hoy -mañana es festivo en Madrid- no está previsto tratar esta cuestión, según explicaron fuentes de varios ministerios y de la Moncloa. Tampoco es seguro que se haga en la reunión del día 16, tal como apuntó el ministro de Presidencia, Ramón Jáuregui, porque en el PSOE aún no han logrado convencer al presidente Zapatero de

acometer la medida, admitieron fuentes socialistas.

La unanimidad en esta cuestión no existe en el Ejecutivo. Hay miembros del Gobierno, como el portavoz y ministro de Fomento, José Blanco, que, como el candidato a la presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, defienden recuperar el impuesto del patrimonio. A la idea de que los ricos contribuyan más se ha sumado con ambigüedad calculada el PP.

A diferencia de otros países, entidades que aglutinan a grandes fortunas, como el Instituto de la Empresa Familiar (IEF), han eludido pronunciarse en este debate.

Este organismo presidido por Isak Andik, propietario de Mango, está integrado por firmas con una facturación media anual de 1.000 millones. A pesar de que no quieren intervenir en el debate, su servicio de estudios ha publicado un informe en el que se destaca que el tributo sobre el patrimonio es de «carácter residual». El informe asegura que en Europa «ha ido desapareciendo progresivamente» y solo se mantiene en Francia, donde se quiere reformar en profundidad e «incluso puede llegar a desaparecer».

EFECTO RETROACTIVO / Los expertos consideran que si de lo que se trata es de reducir el déficit con la obtención de recursos adicionales, la recuperación de este gravamen no será más que una primera etapa y de carácter simbólico, es decir, para demostrar que todo el mundo arrima el hombro para salir de la crisis. Como es un impuesto que se devenga a 31 de diciembre (grava el patrimonio del contribuyente a esa fecha), los juristas interpretan que sería posible recuperarlo y que entrara en vigor con efectos desde el pasado 1 de enero. De ser así, los primeros recursos llegarían a partir de mayo del 2012, cuando se declare.

«En todo caso tiene un efecto legitimador ante futuros incrementos del IVA o los impuestos especiales», que afectan a toda la población, interpreta el presidente del Consejo General de Colegios de Economistas,

Valentí Pich. Los distintos grupos parlamentarios ven las afirmaciones socialistas y populares como «un guiño político y electoral» de cara al 20-N.

Otra vía para gravar más a las rentas altas es el IRPF, pero «esto está fuera del debate, porque además requeriría un proceso más largo», según fuentes de la portavocía del Gobierno.

El Ejecutivo ya aprobó un recargo que entró en vigor en enero pasado en el tramo estatal del

IRPF sobre las rentas de más de 120.000 euros, que tributan al 44% en vez del 43%; y más de 175.000, al 45%. La primera en imponerlo en el tramo autonómico fue Catalunya, cuando gobernaba el tripartito, con un tipo máximo del 49%. El actual Govern de CiU, que suprimió el gravamen sobre las herencias, ha decidido mantenerlo, como ha hecho la coalición conservadora liberal con el tipo del 50% que instauró el Ejecutivo laborista.