Emigración

En un artículo anterior (8/1/14) hablábamos del empleo y desempleo en España. Ambos tienen mucho que ver con la situación económica y con la inmigración. Veamos qué ha ocurrido con la inmigración en España durante los últimos 10 años (datos Eurostat e INE). En el periodo de boom económico (2002 a 2008) entraron en España casi 5 millones de inmigrantes. Unos 700.000 de media anual con un pico máximo de 960.000 en el 2007. A partir del 2008 la cifra desciende y se estabiliza en torno a los 300.000 o 400.000 al año. En ese mismo periodo salen de España unos 900.000 emigrantes.

El saldo migratorio total en estos siete años es positivo de 4 millones de personas (a una media de unos 600.000 al año). Eso quiere decir que el país era capaz de crear puestos de trabajo para todas esas personas, pues sin trabajo los inmigrantes no vienen. El inmigrante no viene en patera a buscar suerte. Viene porque algún pariente o amigo le ofrece un empleo. España ha sido el país con más inmigración en este periodo: 4 millones de entradas netas comparados con 1 millón de Francia, medio millón de Alemania, 2 millones de Italia y 1 millón de Gran Bretaña.

Obviamente, la situación cambia radicalmente en los años de crisis (2009 al 2012). En estos 4 años entran 1,4 millones a un ritmo de unos 350.000 al año, la mitad de los 750.000 de antes. Pero sobre todo, salen 1,6 millones a un ritmo de 400.000 al año versus los 125.000 del periodo anterior. El saldo inmigración-emigración es de 200.000 personas. Es decir, en el periodo de boom han entrado 4 millones de personas y en el periodo de crisis han salido 0,2 millones. Parece que a pesar de la enorme crisis, no se van muchos.

Hasta el año 2003 apenas salían de España unas 40.000 personas al año, menos de un 0,1% de la población. Estas bajísimas tasas de movilidad se daban también en Italia y Portugal. En Alemania salían unas 600.000 personas (casi un 1% de la población) y en Inglaterra unas 300.000 (1% de la población). Parece que los latinos nos movemos menos (claro, aquí se vive bien).

España es a partir del 2011 uno de los países con mayor tasa de emigración, casi un 1%, por debajo de Irlanda (1,9%) y Grecia (1,2%) y superior a Alemania, Inglaterra e Italia. España es además el país en que ha crecido más la emigración: se ha multiplicado por 10 veces.

En Italia, por el contrario apenas ha habido cambios. Esto es lógico, si recibes muchos inmigrantes (entradas) en tiempos de boom económico luego tendrás mucha emigración (salidas) en tiempos de crisis económica. Parte de los inmigrantes se van al no tener trabajo, aunque la mayoría se queda.

¿Y quién se está yendo? De los 400.000 al año, aproximadamente unos 50.000 son nacidos en España, es decir un 12%-13%. Son unos 15.000 más de los que se iban antes del 2002. Es decir, la crisis ha aumentado en 15.000 personas el número de los que salen (datos del 2012, en el 2013 habrán sido superiores). En cuanto a edad, el 60% son menores de 35 años, porcentaje similar al de otros países.