RELACIONES LABORALES

El diálogo social se enquista y corre el peligro de fracasar

Fátima Bañez se reune con los líderes sindicales Toxo y Alvarez y Garamendi y Rosell en la sede del Ministerio de Empleo

Fátima Bañez se reune con los líderes sindicales Toxo y Alvarez y Garamendi y Rosell en la sede del Ministerio de Empleo / periodico

MERCEDES JANSA / MADRID

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El diálogo social entre las organizaciones sindicales CCOO y UGT y empresariales CEOE y CEPYME prácticamente no existe. Tras las últimas reuniones de noviembre entre los máximos dirigentes de estas organizaciones, sólo ha habido algunos encuentros sectoriales sin frutos. Pero la semana pasada se produjo un cruce de cartas que muestran el mal ambiente que reina entre los agentes sociales, como no se veía desde hace años, y en las que está sembrada la semilla del fracaso.  

Con fecha 22 de febrero Juan Rosell Antonio Garamendi enviaron una carta a Ignacio Fernández Toxo y Pepe Álvarez en la que enuncian los temas que deberían formar parte de la negociación ya que la patronal no quiere hablar sólo de subida salarial. Entre las propuestas figuran reivindicaciones históricas de la CEOE que en cuatro décadas de democracia no han logrado ser atendidas por ningún gobierno y otras que han fracasado. Por ejemplo, reclaman una ley de Huelga, el recorte de competencias de los delegados sindicales en las empresas y cambios en las elecciones sindicales.

CEOE y CEPYME  proponen una rebaja en las cuotas empresariales a la Seguridad Social y limitar las responsabilidades del empresario en caso de accidente laboral, permitir que las mutuas y los médicos de empresa den las altas y suprimir la obligación del empresario de pagar las prestaciones de baja por enfermedad. También quieren recuperan para el contrato específico para jóvenes vinculado a la inserción y la formación.

ENOJADA RÉPLICA

Un día después Toxo y Álvarez replicaba, también por escrito, visiblemente enojados, que  con su actitud da la sensación de que la patronal está "mareando la perdiz con la intención de no llegar a ninguna parte". Los líderes sindicales Consideran que el temario es un "rancio programa máximo empresarial", de "marcado tono antisindical"  que pretende incrementar el "poder discrecional" del empresario  mejorando la competitividad de las empresas "a costa de una mayor desregulación".

Antes de que se produzca una ruptura, los líderes sindicales piden una reunión de la comisión de seguimiento del acuerdo de convenios, cuya vigencia acaba este año.