La UE denuncia a China por tercera vez ante la Organización Mundial del Comercio

La Unión Europea ha decidido denunciar por tercera a China ante la Organización Mundial del Comercio debido a las restricciones que el gigante asiático impone a la exportación de materias primas. La denuncia, según ha explicado la Comisión Europea, afecta a once materiales entre las que figuran algunos claves para la economía europea como el grafito, el cobalto, el magnesio o el antimonio.

China impone medidas restrictivas, incluidas cuotas y aranceles, que limitan el acceso a estos once productos -grafito, cobalto, cobre, plomo, cromo, magnesia, talco, tantalio, estaño, antimonio e indio- para las compañías de fuera de China. El resultado, denuncia Bruselas, es que las prácticas del gigante asiático distorsionan el mercado y favorecen a la industria china a costa de los consumidores europeos y en clara vulneración de las reglas de la OMC.

“No podemos quedarnos de brazos cruzados viendo que nuestros productores y consumidores son golpeados por estas prácticas comerciales desleales. Los dos últimos fallos de la OMC sobre restricciones a la exportación de China son claros: estas medidas van contra las reglas del comercio internacional”, ha advertido la comisaria de comercio, Cecilia Malström. Entre las materias primas afectadas por las restricciones hay algunas con repercusiones muy importantes para la economía europea.

Este es el caso del grafito. El 95% de las importaciones que recibe la UE proceden del país asiático y lo mismo ocurre con otros materiales como el cobalto o el indio que se destinan a la fabricación de baterías recargables y pantallas de ordenador, teléfonos móviles y televisiones. Aunque China no tiene minas de cobalto sí ha cerrado numerosos acuerdos con países terceros que lo sitúan como el principal productor de cobalto refinado.

MATERIAS PRIMAS

Esta es la tercera vez que la Unión Europea emprende acciones legales contra China, que exporta materia primas por 1,2 billones de euros y una sexta parte de las mismas terminan en la Unión Europea. La primera fue en el año 2012, también por restricciones de exportación en materias primas que se utilizan para producir objetos de la vida cotidiana y del que China es líder exportador. La segunda, en el año 2014, debido a restricciones en la exportación de elementos poco comunes de la tierra como el wolframio y el molibdeno y por restricciones en los derechos y cuotas de exportación, entre otros.

El análisis preliminar de la Comisión Europea sugiere que la eliminación de los derechos de exportaciones impuestos por el gobierno chino podría permitir a la UE aumentar el suministro de materias primas a la economía europea por valor de 19 millones de euros, un aumento del 9,2%. Bruselas apunta, no obstante, el incremento real podría ser todavía mayor si la Pekín eliminara otras medidas que utiliza para restringir las exportaciones.