Consumo e inversión vuelven a ser los motores de la economía

Por primera vez en cinco años el PIB volvió a crecer en el 2014 y lo hizo con fuerza, logrando un avance del 1,4% que constituye todo un rebote si se compara con la tasa negativa del -1,2% del 2013. En solo un año, la economía española logró dar en el 2014 un salto de 2,6 puntos de PIB (del -1,2% al 1,4%) y lo hizo con el impulso exclusivo de la demanda interna (consumo e inversión), ya que el sector exterior (el único motor que funcionó durante la crisis) restó empuje a la producción (por el avance de las importaciones).

Las cifras de la Contabilidad Nacional Trimestral que ayer detalló el Instituto Nacional de Estadística (INE) relativas al cuarto trimestre y al conjunto del 2014 revelan que, al menos desde un punto de vista macroeconómico, el año pasado significó un antes y un después para algunas sombras de la crisis.

EMPLEO Y SALARIOS

El número de ocupados equivalentes a tiempo completo creció el 2,4% en el conjunto del año, lo que supuso 392.000 nuevos puestos. Bastante menos subió el conjunto de la masa salarial (el 1,3%), de modo que la remuneración media por asalariado retrocedió el 0,5% a final de año. Todo ello no impidió que por primera vez desde el estallido de la crisis los sueldos hayan ganado peso en el reparto de las rentas en detrimento de los beneficios empresariales.

El 2014 también significó un antes y un después para el sector de la construcción que logró un avance anual del 3,3% en el cuarto trimestre del año, convirtiéndose en el de mayor crecimiento de todos, si bien el conjunto del año aún se saldó con una caída del 1,5%.

Para UGT, los datos del INE solo muestran «una aparente recuperación» de la economía en la medida en que « cada vez es mayor el deterioro de la calidad del empleo y el aumento de la desigualdad y de la pobreza». El secretario de Economía del PSOE, Manuel de la Rocha, expresó su preocupación «por que se repita el patrón de crecimiento que nos llevó a la crisis» con «una aportación negativa del sector exterior, la construcción como motor, el crecimiento de la temporalidad laboral y la caída de la productividad».

TENDENCIA ACELERADA

En el cuarto trimestre del 2014 el PIB creció el 0,7% respecto al tercero y logró un avance del 2% en comparación con el mismo periodo del 2013 (el ritmo más alto desde mediados del 2008), dibujando así un perfil acelerado. Prácticamente todos los componentes del PIB evolucionaron de menos a más a lo largo del ejercicio, salvo el consumo público, cuyos recortes se agudizaron en la última parte del año, con una caída del del 1% en el cuarto trimestre.

El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, destacó que el crecimiento del PIB en el 2014 anticipa que la previsión de aumento del 2,4 % del PIB para este año podría incluso superarse. «En abril tendremos más información y cuando remitamos el programa de estabilidad a Bruselas veremos la cifra definitiva», aseguró tras insistir en que el Gobierno siempre hace previsiones «prudentes y cautas».