Tras intervenirla en noviembre

Colombia anuncia la liquidación de la filial de Gas Natural Fenosa en el país

Gas Natural presentará una demanda ante el organismo de arbitraje del Banco Mundial, Ciadi

Fachada de la sede central de Gas Natural en Barcelona.

Fachada de la sede central de Gas Natural en Barcelona.

AGUSTÍ SALA / BARCELONA

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El superintendente de Servicios Públicos Domiciliarios de ColombiaJosé Miguel Mendoza, ha anunciado el inicio de un proceso de venta por liquidación de la filial de Gas Natural Fenosa en el país, Electricaribeintervenida a finales del año pasado por las autoridades locales. La filial arrastraba una situación complicada por la falta de pago de clientes, entre los que hay organismos públicos.

Las autoridades colombianas, que aseguran que la operación "no costará ni un peso" a los ciudadanos, afirman que Gas Natural solo obtendrá ingresos con la operación una vez se hayan completado los pagos a los distintos acreedores, conforme al orden de prelación establecido por ley.

Por su parte, Gas Natural ultima la presentación de una demanda ante el organismo arbitral del Banco Mundial, el Ciadi, según fuentes conocedoras de este proceso. El objetivo sería exigir una indemnización. En el cambio de contabilidad que realizó a finales del año pasado para adaptarse a la nueva situación, valoró su participación en Electricaribe en 475 millones de euros. En todo caso, la reclamación será sobre "la totalidad del valor justo de mercado, que es muy superior", al reconocido en libros, según la empresa. La cifra superaría con creces los 1.000 millones, según fuentes del sector.

Pese a todo ello, el presidente de la Gas Natural, Isidre Fainé, logró el lunes abrir una vía de diálogo directa con el presidente del país, Juan Manuel Santos, tras una reunión que mantuvieron en Bogotá, según fuentes conocedoras de ese encuentro. Gracias a ello, Gas Natural podría seguir hablando de inversiones futuras en el país, a cambio de un marco regulatorio más seguro. Santos ha defendido la decisión en twitter, como "responsable" de cara a los usuarios.

En este sentido, el grupo español afirma que el Gobierno colombiano "no puede ignorar que Electricaribe (en cuyo capital participa y cuenta con un miembro en el consejo de administración) sufre una situación crónica de fraude e impagos desde hace años". En la actualidad esa deuda asciende a unos 1.300 millones de euros. Recuerda, a su vez, que la inversión en la firma entre el 2011 y el 2015 fue de 255 millones, "que podría haber sido tres veces mayor de haber contado con medidas del Gobierno para atajar el grave problema de fraude e impago".     

La Superintendencia, un oganismo equiparable a la autoridad de la competencia en España, afirma que las conclusiones de los estudios realizados tras intervenir Electricaribe "permiten afirmar que la compañía no está en condiciones de prestar un servicio de energía con la calidad y la continuidad debidas, y de ahí que sea necesario ordenar la liquidación". La resolución establece "una etapa de administración temporal durante la toma de posesión de Electricaribe, con el fin de garantizar la prestación continuada y sin interrupciones del servicio de energía eléctrica en el área atendida por la compañía".

Gas Natural posee el 85,38% del capital de la compañía colombiana, heredada de Unión Fenosa, y que pasó a ser de su propiedad al absorber en el 2009 la eléctrica. La filial se venderá a un nuevo operador capaz de asumir las nuevas inversiones. La compañía española destaca que la decisión de la autoridad colombiana "es contraria al espíritu de profundización de relaciones comerciales entre la Unión Europea (UE) y Colombia conforme al Acuerdo de Libre Comercio e impacta negativamente en el clima requerido para que se produzcan los flujos de inversión internacional". También va en la dirección contraria a los principios que preconiza la OCDE, que agrupa a los 34 países más industrializados del mundo, "de la que Colombia es candidata a la adhesión", recuerda Gas Natural.     

El proceso de liquidación comenzará "inmediatamente", será "absolutamente público" y tendrá una duración cercana a un año. El objetivo será "encontrar un operador que asuma la prestación del servicio de energía en la costa caribeña" y que asuma las inversiones necesarias para acabar con el "avanzado deterioro" de las redes en la zona.

Las autoridades intentarán vender la filial "al mayor precio, para beneficio de los usuarios y de los acreedores internos y externos" de la empresa.

Electricaribe tiene un pasivo total de 2,4 billones de pesos colombianos (750 millones de euros), de los que 1,8 billones (565 millones de euros) corresponden a entidades financieras. Además, el plan de inversiones que debe afrontar el nuevo operador, y que se convertirá en el "eje central del proceso de selección", asciende a 240.000 millones de pesos (75 millones de euros) anuales.