Los sindicatos europeos piden un plan de inversiones para crear empleo

La Confederación Europea de Sindicatos (CES) teme que la cumbre de la Unión Europea (UE) del jueves y viernes próximos no tome ninguna decisión para rebajar la alta tasa de paro juvenil, que se quede en “agua de borrajas” y defraude las expectativas creadas hace unas semanas.

Durante una reunión de hora y media con Mariano Rajoy en La Moncloa, la secretaria general de la CES, Bernadette Segol y los líderes españoles Ignacio Fernández Toxo (CCOO), Cándido Méndez (UGT) y Julio Salazar (USO) han pedido al presidente del Gobierno que reclame en la cumbre un ambicioso programa de inversiones públicas para toda la UE para estimular la economía como la vía más rápida contra el desempleo que afecta a 27 millones de ciudadanos europeos.

La impresión que han sacado los sindicatos es que Rajoy ha renunciado a dar esta batalla. Las elecciones alemanas "pesan como una losa" en el desarrollo de la cumbre, según Fernández Toxo, que como presidente de la CES ha solicitado también que la cumbre se pronuncie sobre la implantación de una renta mínima garantizada para combatir la pobreza y las desigualdades que ganan terreno en el continente.

Bernadette Ségol, ha expresado su temor a que la cumbre europea se cierre sin “ningún tipo de contenido” ya que el borrador de conclusiones que han abordado en el encuentro, “me parece vacío”. En él no figura ninguna referencia al desempleo juvenil pese a que es un compromiso que se fijó hace un año. En la agenda destaca el desarrollo de la unión bancaria y los programas del Banco Central Europeo (BCE) y del banco de Inversiones Europeo (BEI) para facilitar el crédito a las pymes.

 En la reunión de La Moncloa ha habido coincidencia en que se ahondará en el descrédito de las instituciones europeas si la cita de jefes de Estado y de gobierno no da respuesta a la crisis económica que en Europa arrastra seis trimestres en recesión. Rajoy ha pedido a Ségol, que intervendrá al inicio de la cumbre, que insista a los mandatarios en que lleven un mensaje positivo y de contenido a los ciudadanos. De lo contrario, la desafección hacia las instituciones europeas será irreversible ante las elecciones al parlamento de Estrasburgo del próximo año.

La única esperanza es que se adelante los 6.000 millones para combatir el paro previstos hasta el 2020, a los dos próximos años. Según la ministra de Empleo, Fátima Báñez, España espera lograr entre 1.500 y 2.000 millones de euros de ese fondo.