Jura, el lujo en la cafetera

El mejor café resurge con la reactivación de la economía. Más allá de la reciente inclusión de las cápsulas monodosis de café en las estadísticas del índice de precios de consumo (IPC), el mundo de los muy cafeteros gana fuerza en España. Y es que en el sector consideran que en España hay mercado potencial, clientes deseosos de marcar distancias y hacer de la taza de la mañana y de la tarde un momento más destacable. En ese mundo de lujo cafetero, la firma suiza Jura potencia su presencia en España con la inauguración de las instalaciones centrales en Barcelona. 

El 'hospitality center' de Jura en España quiere reforzar la imagen del café como 'delicatessen' y ser escaparate para sus cafeteras de alta tecnología. La firma defiende un mercado en el que el precio alto es más argumento que freno para las ventas. Y es que las cafeteras automáticas de Jura se han pensado para consumidores expertos y bolsillos holgados, hogares sin apreturas y oficinas con empleados de paladares exquisitos. Y es que en el asunto de las máquinas de café los consumidores se reparten mucho. Hay partidarios de la típica cafetera 'tipo moka', de las máquinas de filtrado, las express, las de cápsulas y, los menos, de las superautomáticas. Estas últimas, las que emplean café natural en grano, que muelen y hacen el café, son las que fabrica Jura. Y cuestan entre 699 y 4.000 euros, según su web. 

Marcha de la empresa

Los argumentos comerciales de la marca se han traducido en una cuota de mercado en torno al 20% en su segmento en España y expectativas de crecimiento. De tener una facturación de 1,45 millones de euros el año pasado, esperan crecer en torno al 30% al cierre del 2017, hasta casi 1,9 millones. El 85% de sus cafeteras se venden en hogares, pero el canal profesional apunta a crecimientos más altos. En cualquier caso, la clientela es selecta. Arias explica que el 86% de las máquinas automáticas que se venden en España tienen un precio inferior a los 600 euros y el mercado de Jura se sitúa por encima de ese umbral. Elitismo en forma de café, un millar de cafeteras al año. 

Del total de ventas de la marca, en torno al 30% se canalizan a través de internet, el 22% a través de comercializadores independientes y el 8% a través de la web de la firma. Un acuerdo con El Corte Inglés aumentará ese porcentaje de venta 'on line' hasta cerca el 40% en el 2018. ECI, Mediamarkt y Fnac son aliados en la venta de estas sorprendentes cafeteras de lujo, con unos 140 puntos de venta físicos en toda España.

Torrefacto versus natural

"Ha mejorado el consumo de café en España en los últimos años", asegura Miguel Arias, responsable de Jura en España. Sin embargo, recuerda que "España es uno de los pocos países del mundo donde se vende el café torrefacto (tostado con azúcar), más amargo, y que esconde los aromas del café". Otra particularidad del mercado español es el auge de las cafeteras monodosis, "que casi se regalan", dice Arias, y que considera "una especie de impresoras de café, en las que el negocio se traslada a los consumibles". El caso es que en España se venden unas 18.000 máquinas automáticas al año (30.000 en el 2007) y en Alemania, por ejemplo, unas 900.000. Esas cifras hacen pensar a fabricantes como Jura que en España las ventas de las máquinas superautomáticas pueden aumentar de la mano de la recuperación económica.

Diseño, calidad y economía

¿Pero qué puede impulsar a la compra de una máquina de café de más de 1.000 euros? Arias lo tiene claro. En su opinión es una cuestión de calidad del café que se consume y libertad de elección de la materia prima. Café y solo café, frente a la cápsula. Pero Jura es consciente de que el diseño es relevante para la venta. Además, Arias asegura que si el consumo es elevado incluso la balanza económica puede ser un argumento válido. El precio de un café en una maquina de Jura puede ser de a partir de 10 céntimos (depende del café elegido), por lo que el precio de adquisición "puede amortizarse en seis meses en una empresa, por ejemplo, si se compara con los costes de uso y mantenimiento de una cafetera monodosis", asegura Arias.