BALANZAS FISCALES

Cada catalán aporta 2.260 euros más de media de los que recibe

El 'conseller' de Economia, Andreu Mas-Colell, revela que el déficit fiscal se ancló en el 2010 en el 8,5% del PIB, hasta 16.543 millones de euros

AGUSTÍ SALA / Barcelona

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El déficit fiscal de Catalunya se estancó en el 2010 en el 8,5% del producto interior bruto (PIB), como el ejercicio anterior al llegar a 16.543 millones de euros. El conseller de Economia, Andreu Mas-Colell, ha presentado la actualización de este dato, según el cual cada catalán aportó de media 2.260 euros más de los que recibió, es decir nueve euros más por cabeza que en el ejercicio precedente, o un 0,40% más. A diferencia de un año atrás, la actualización de las balanzas fiscales, realizada por mandato del Parlament, se presenta en un contexto en el que el Govern ya no aspira al pacto fiscal como entonces sino a un estado propio.

La metodología para el cálculo de la balanza fiscal es "idéntica" a la del año pasado, según Mas-Colell. El resultado arroja un saldo negativo que indica la cifra de más que Catalunya aporta en forma de impuestos con respecto a lo que recibe como inversiones y gasto del Estado. La primera fórmula, la del flujo monetario, mide el impacto económico generado por la Administración central en el territorio catalán. Este sistema "es especialmente relevante en época de crisis y de paro", ha destacado.

Con esta modalidad, Catalunya aportó el 19,5% de los impuestos del Estado, por encima de su peso económico en el conjunto; mientras que recibió en forma de gasto 14,2% del total, por debajo de su peso económico y poblacional, según el conseller.

Si se excluye la Seguridad Social, el déficit entre ingresos aportados y gastos recibidos es del 8,2% en lugar de ser el 5,2% y es solo del 2,1% del PIB si solo se tiene en cuenta la Seguridad Social. Eso refleja, "que la diferencia entre el porcentaje de lo que Catalunya recibe y lo que aporta se multiplica casi por cuatro cuando se mira el gasto de carácter discrecional", ya que las prestaciones responden a derecho individuales.

Con el otro sistema del flujo del beneficio, que mide la actuación de la Administración central sobre el bienestar de los residentes en Catalunya, la aportación en forma de impuestos es del 18,9% y el gasto, el 15,4%. Así, el déficit fiscal es del 5,8% del PIB, ha explicado Mas-Colell.

En la actualización de las balanzas fiscales presentada en marzo del año pasado, cada catalán aportaba 2.251 euros de media más de los que recibía, con datos del 2009. El estudio, también dado a conocer por Mas-Colell, revelaba que este desfase daba un saldo negativo para Catalunya estancado en el 8% del producto interior bruto (PIB) entre 1986 y el 2009. En el último ejercicio de ese periodo, el déficit era de 16.409 millones, el 8,5% de la riqueza total de la comunidad.

La difusión de esas cifras, lanzadas pocos meses antes de iniciar entonces negociaciones de cara a un pacto fiscal, provocó críticas de la oposición. Desde las filas del PSC se criticó el hecho de que el Govern no mostraba todos los métodos existentes para calcular las balanzas fiscales.