Bruselas avisa de que "no dudará" en sancionar a España si el ajuste no es suficiente

La Comisión Europea ha avisado a España que la flexibilización obtenida en el objetivo intermedio de déficit para el 2012 no le ha librado del riesgo de ser sancionada por incumplir las recomendaciones de la Unión Europea (UE) en la reducción del déficit público debido al fuerte desvío registrado en el 2011. El comisario de Asuntos Económicos y Monetarios,Olli Rehn, ha señalado que "no dudará" en proponer sanciones a España, como las adoptadas contra Hungría, si los presupuestos para el 2012 no incluyenmedidas de ajuste suficientes y creíbles para garantizar el cumplimiento del objetivo de déficit del 5,3% del producto interior bruto (PIB) para este año y del 3% para el 2013.

Ante la polémica generada por la sanción impuesta a Hungría y la flexibilización a España del objetivo intermedio de déficit público para este año, Rehn ha explicado que "la Comisión Europea está actualmentereuniendo información de las autoridades españolas para comprender precisamente la talla y los motivos del desvío de 2011" y examinará "también las perspectivas presupuestarias de España este año y más allá en el contexto de las previsiones económicas que publicaremos en la primera mitad de mayo".

"Si la evaluación en curso llega a la conclusión de que España no ha cumplido con las recomendaciones relevantes en el marco del procedimiento por déficit excesivo, la Comisión no dudará en sacar las conclusiones pertinentes y presentar unanueva recomendación de acuerdo con las disposiciones del Tratado", ha subrayado Rehn.

Amonestación

Esto implicaría, como en el caso de Hungría, la propuesta deamonestación a España en el Consejo de Ministros de Economía Finanzas de la UE por haber incumplido sus obligaciones de reducción del déficit y saneamiento de las cuentas públicas. Pero, a diferencia de Hungría, la propuesta sería aprobada automáticamente por elConsejo de Ministros de la UE si no hay una mayoría cualificada de países en contra, en aplicación de las nuevas normas de gobierno económico de la eurozona.

Una vez constatado y ratificado el incumplimiento de España, la Comisión Europea podría proponer inmediatamente la imposición deuna sanción equivalente al 0,2% del PIB (unos 2.000 millones de euros), que también quedaría aprobada de forma automática si no hubiera una mayoría cualificada de países en contra.